Una bodega, contra la traza del puente de Isla Jordán

ALLEN (AA).- La noticia sobre la anunciada construcción del puente sobre el río Negro en Isla Jordán, en Cipolletti, ha generado malestar en gente del lugar. Uno de los principales reclamos provino de una bodega que posee parte de sus viñedos en ese sector de la margen sur: criticó fuertemente la falta de un proyecto integral para la conexión de las rutas nacional 22 y la provincial 7.

Los dueños de Bodegas y Viñedos Estepa elevaron numerosos pedidos de informes tanto a la empresa vial rionegrina, Viarse, como a las autoridades de la municipalidad cipoleña, pero las respuestas recibidas fueron a medias, se indicó. «Pedimos una definición precisa sobre el lugar donde se emplazará el futuro puente pero primero nos dijeron una cosa y después otra. En 2002 antes de hacer la plantación consultamos a Viarse, al Endemas (Ente de Desarrollo de la Margen Sur) y a la municipalidad de Cipolletti, pero en ese momento nos dijeron que el puente iba a pasar por un extremo del viñedo y ahora nos enteramos de que no es así y nos afecta un extremo de nuestro emprendimiento», sostuvo Juan Alvarez.

«Sabemos que esta es una obra que favorece el desarrollo, al cual no nos oponemos para nada, pero creemos que tiene que hacerse en forma pensada, y hasta ahora no existe un proyecto integral ni un estudio de impacto ambiental hecho», protestó el bodeguero.

La firma posee 100 hectáreas en la margen sur y alrededor de seis ya están plantadas con variedades de uvas finas. El resto de sus plantaciones están ubicadas en Guerrico.

El emprendimiento comprende una plantación agreste de viñedos que apunta a elaborar vinos finos para exportación. La producción total de la empresa supera actualmente las 120.000 botellas que se comercializan en mercado interno y el exterior.

Estepa es propietaria de las tierras ubicadas al este del camino que une la balsa con la ruta provincial en la margen sur, por lo cual «nos encontramos ante el temor de que la futura obra afecte de modo irreversible nuestra plantación», sostuvo Alvarez.

Desde Viarse se informó que se elaboró un documento de anteproyecto y evaluación de impacto ambiental preliminar que fue aprobado por el Consejo de Ecología y Medio Ambiente (Codema), y que también se tuvo en cuenta el impacto sobre el emprendimiento productivo de Estepa SA con quienes se acordó desplazar el eje del proyecto hacia aguas abajo, con la intención de disminuir el impacto ambiental.

No obstante, Alvarez sostuvo que «es absurdo e irresponsable decir que 'se decidió' correr la ubicación del puente de 70 a 100 metros, por lo menos Viarse debería saber que un puente no es un pedazo de hormigón armado que se ubica en un lugar cómodo de un río, sino que es una parte, un engranaje de una obra vial compleja y extensa que en este caso debe vincular satisfactoriamente la ruta 22 con la ruta 7».

Añadió que «para nosotros, que lo corran 100 metros más acá o más allá no nos soluciona el problema, tenemos temor al impacto propio de la construcción del puente, la gran circulación y también los conflictos de urbanización que esto trae aparejado. Porque nuestro proyecto es totalmente agreste y hasta hicimos la plantación respetando la flora existente», explicó.

El empresario, a través de una carta documento enviada al organismo vial, criticó además que «sin un proyecto constructivo integral y sin estudio de impacto ambiental, Viarse carece de autoridad técnica para saber si se afecta o no nuestro emprendimiento».

La obra del puente en Isla Jordán se licitará hoy y comprende una longitud de 300 metros, en tanto que el monto de inversión total previsto supera los 14 millones de pesos.

Nota asociada: Realizan hoy la apertura de sobres

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