Una demostración de fuerza
«Lo gentil no quita lo valiente», dice el refrán. Sin embargo Néstor Kirchner, ayer en el Senado, hizo una demostración de fuerzas cuasi humillante hacia el ex presidente, Carlos Menem, a quien no miró en ningún momento de su juramento y hasta le dirigió una broma burlona.
Llegó al Congreso, como un invitado más entre tantos que asistieron a la jura de senadores. Su ingreso pasó casi inadvertido, si no fuera porque algunos aplausos de hinchada propia en las galerías.
Los integrantes de ceremonial del Senado estuvieron hasta último momento pendientes de movimientos sigilosos de la custodia presidencial. Nadie se atrevía a confirmar el arribo de un presidente esquivo a las ceremonias institucionales.
Antes del primer juramento, irrumpió ante la sorpresa de los concurrentes. Se mostró generoso en abrazos y saludos, a quienes le darán respaldo político y serán su tropa fiel de lo que le reste de mandato, tras la importante victoria electoral del 24 de octubre. A todos menos a uno.
Al llegar el turno del juramento de Carlos Menem, por la banca por la minoría de la provincia de La Rioja, invadió un frío en el ambiente que a los «pingüinos» presentes les hizo recordar alguna mañana invernal en el Calafate.
El titular del Senado, Daniel Scioli, le estrecho la mano a su otrora hacedor político, quien sin despeinarse volvió a su banca, advirtiendo que el presidente imprimía un halo de indiferencia abismal. Un muro infranqueable.
Con la mirada perdida en el horizonte, Kirchner sólo cambió su gélida estampa para bromear con un gesto cercano en lo infantil.
Guiñandole el ojo a un cronista de «Caiga quien Caiga», que relataba jocoso la ocurrencia, tocó madera al ser nombrado por Scioli el ex presidente riojano.
La incomodidad colmo la sala hasta que juró la hermana del primer mandatario, Alicia Margarita K, lejos la más aplaudida por los demás senadores e invitados especiales.
Quizás no llamó tanto la atención de los oficialistas, el afectuoso saludo y aplauso que le dedico al puntano, Adolfo Rodríguez Saá, quien se sentará en las sesiones parlamentarias, atrás de Cristina. (ABA)
HORACIO CARIDE
Notas asociadas: Entre Kirchner y Menem sólo hubo indiferencia
Notas asociadas: Entre Kirchner y Menem sólo hubo indiferencia
"Lo gentil no quita lo valiente", dice el refrán. Sin embargo Néstor Kirchner, ayer en el Senado, hizo una demostración de fuerzas cuasi humillante hacia el ex presidente, Carlos Menem, a quien no miró en ningún momento de su juramento y hasta le dirigió una broma burlona.
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios