Una inundación, mudanzas y solidaridad marcaron la historia de la Casa de Gobierno

La historia de la Casa de Gobierno de Río Negro tiene raíces en la dramática inundación que soportara Viedma el 26 de julio de 1899. Las aguas descontroladas del río Negro dejaron un saldo desolador: plantaciones devastadas, hacienda perdida, cuantiosa destrucción de viviendas rurales y urbanas.

El fenómeno destruyó el edificio donde funcionaba la Gobernación, que había sido construido durante la gestión de Álvaro Barros y que se hallaba donde actualmente se encuentra la residencia de los gobernadores. Ante esa situación, el Dr. Eugenio Tello trasladó su despacho a Carmen de Patagones (Buenos Aires) y posteriormente el gobierno se radicó en Choele Choel, que se convirtió en capital provisoria.

El 9 de mayo de 1913 el Poder Ejecutivo declaró al pueblo de Viedma capital definitiva del territorio de Río Negro y el 1 de noviembre del mismo año autorizó el retorno de la gobernación, que funcionó en el local que ocupaba la Escuela Normal Mixta sobre la calle Buenos Aires, frente a la plaza Alsina.

La construcción del nuevo edificio para la Gobernación fue preocupación de todos los gobernantes a partir de entonces. Correspondió a Pedro A. Serrano, designado gobernador en 1913, buscar los medios para la construcción del nuevo edificio.

En estos trámites, logró conseguir una partida de 25.000 pesos del gobierno nacional, que poco después fue reducido a sólo 7.000 pesos, debido a las dificultades financieras que afrontaba el país. Sin embargo, el gobernador recurrió a la sociedad viedmense y pidió la colaboración general, que le llegó ampliamente, tanto que hasta se sumaron a la convocatoria los reclusos de la cárcel local. Con estos últimos hizo fabricar ladrillos y la obra se encaró definitivamente. Luego de años de arduo trabajo, el 9 de julio de 1916 quedó inaugurada oficialmente la Casa de Gobierno de Viedma.