Una joven agente ratificó la denuncia contra el subjefe de Policía

NEUQUEN (AN).- La agente penitenciaria que acusó al subjefe de Policía, Moisés Soto, de pedirle favores sexuales a cambio de un traslado, ratificó la acusación y se constituyó en querellante en la causa. En tanto, dos testigos ya declararon ante los investigadores y otros dos lo harán en los próximos días.

Según se supo ayer, la mujer hizo ante la justicia una declaración de nueve carillas de extensión en las que relató en detalle cómo fue el episodio que vivió en la oficina de Soto. Y para poder seguir de cerca la investigación, se constituyó en querellante.

El expediente está ahora en manos del juez de Instrucción Nº3, Marcelo Muñoz, quien todavía no citó a declarar al acusado. En cambio sí lo hicieron dos policías que no fueron testigos directos del hecho, porque ocurrió sin la presencia de otras personas, y están llamados a declarar otros dos.

Un trascendido indicaba que algunos policías que habrían tenido conocimiento del incidente fueron trasladados a remotas unidades del interior. Según pudo averiguar «Río Negro» los traslados efectivamente existieron (uno fue destinado a Buta Ranquil y el otro a Barrancas) pero el pase está fechado antes de la denuncia de la mujer policía y no después.

Como informó este diario la semana pasada, la denunciante es una joven de 22 años, casada y con un hijo, pariente lejana de Soto y recién egresada en el escalafón del Servicio Penitenciario provincial. A principios de febrero la mujer pidió una audiencia con Soto, quien la recibió ya caída la tarde en su oficina. Ella le planteó que quería que la trasladen a Chos Malal, donde vive su familia, y el subjefe le habría dicho que a cambio tenía que «salir con él».

La joven se molestó con el comentario y salió llorando de la oficina, circunstancia en que la habrían visto al menos dos efectivos que aguardaban en la antesala del despacho.

El caso llegó a conocimiento de la ministra de Seguridad, Susana Arévalo, quien dispuso lo necesario para que la joven pueda viajar de inmediato a Chos Malal. Según las fuentes, la ministra no hizo la denuncia a pesar de que se trata de una funcionaria que estaba en conocimiento de la presunta comisión de un delito. Una vez que llegó a su ciudad, la joven policía se presentó en la fiscalía e hizo la denuncia. El fiscal de Chos Malal se declaró incompetente porque el hecho ocurrió en Neuquén y giró las actuaciones a esta capital.