Una multitud exigió justicia para esclarecer el ataque de la AMIA
Nuevas promesas del gobierno para encontrar a los culpables. De la Rúa y su gabinete en pleno asistieron ayer al acto.
BUENOS AIRES. -En medio de estrictas medidas de seguridad, una multitud estimada en cinco mil personas, exigió a la Justicia que de una vez por todas esclarezca el brutal atentado contra la mutual judía AMIA y se castigue a los culpables, en un acto de hondo contenido emotivo, tal vez el más fuerte desde que ocurrió el ataque hace seis años.
Los máximos dirigentes de la comunidad judía en la Argentina repudiaron en sus durísimos discursos, intensamente conmovedores, a los terroristas que cometieron el atentado que causó 86 muertos, y sus cómplices argentinos, entre los que veladamente mencionaron a ex funcionarios del anterior gobierno y miembros de la justicia, además de los ex policías y otros detenidos por la causa. La concurrencia se apiñó a lo largo de la calle Pasteur, frente a la sede de la reconstruida AMIA, adornada con siluetas que representaban a los muertos, y con 86 velas encendidas para cada una de las víctimas.
De cara al palco, el presidente Fernando de la Rúa, mezclado entre la gente, siguió toda la ceremonia. También entre la multitud estaban el vicepresidente, Carlos Alvarez, el ex presidente Raúl Alfonsín, todos los miembros del gabinete nacional y legisladores de la oposición.
El diputado justicialista Carlos Soria asumió en soledad, la representación del partido de la oposición, ya que no se presentó ni solo miembro del anterior gobierno de Carlos Menem.
La concentración de ayer fue inédita: jamás había asistido el gobierno en pleno. En la anterior administración, el entonces presidente Carlos Menem jamás concurrió a ninguno de los actos. El presidente de la Rúa había decidido ir al acto en calidad de «ciudadano» y no de jefe del Estado, y dijo que llegaba al lugar donde estalló la bomba con «un profundo dolor por el recuerdo de lo ocurrido».
De la Rúa rechazó la interpretación de que se formularon duras críticas en su contra y dijo que en realidad, cada uno «expresó su sentimiento», en tanto sostuvo que las autoridades de la AMIA y la DAIA le «agradecieron» su presencia al afirmar que «los reconfortaba».
El acto comenzó con la difusión de un tema de Vangelis Papathanasius y una voz grabada de un niño, hijo de muertos en el atentado, relatando sus recuerdos y su experiencia, mientras la multitud escuchaba en silencio. A las 9.53 exactas, se escuchó la sirena que sumió en un silencio más hondo aún, y en una intensa emoción, a todos quienes revivieron en ese instante el horror de lo que había ocurrido seis años atrás. Seguidamente se pidió un minuto de silencio y a continuación se encendió una vela por cada uno de los 86 muertos, que a medida que eran nombrados recibían un simbólico grito de «Presente» por parte de la multitud.
El acto, conducido por la periodista Fanny Mandelbaum, continuó con el discurso del titular de la DAIA, Rogelio Cichowolsky, primero en la lista de oradores, seguido por el presidente de la AMIA, Hugo Ostrowel; la periodista Magdalena Ruiz Guiñazú; el presbítero Rafael Brown; el rabino Sergio Bergman, y por último en representación de los deudos, Mario Aberbuch. Cichowolski pidió «juicio oral ya» contra los acusados por el atentado, al sostener que «ya pasó la hora de las condolencias: basta de retórica, queremos la verdad».
El presidente de la AMIA, Ostrower, acusó particularmente al gobierno anterior de Carlos Menem y al juez Juan José Galeano por la falta de respuestas, y reclamó el esclarecimiento de lo ocurrido declarando el atentado «cuestión de Estado».
Emocionado por «la multitud» que se hizo presente, Ostrower sostuvo que desde remotas latitudes decidieron la realización de la matanza en Buenos Aires» personas que «hoy son considerados respetables jugadores del comercio internacional», con lo que pareció aludir a un traficante de armas sirio.
El titular de la AMIA criticó duramente al juez Galeano, al afirmar que «me resisto a seguir llamandolo juez» y cuestionarle su «falta de independencia» respecto del anterior gobierno.
Cerró la serie de conmovedores y durísimos discursos Mario Aberbuch, familiar de un muerto, quien afirmó que «el presidente Fernando de la Rúa firmó un pagaré ante una multitud, y quien firma un pagaré, debe levantarlo». (DyN)
Un rabino cuestionó al juez Galeano
El rabino Sergio Bergman lanzó un duro ataque contra el magistrado que lleva la causa AMIA, Juan José Galeano, al señalar que «me resisto a seguir llamarlo juez» y cuestionarle su «falta de independencia» respecto del anterior gobierno, en tanto criticó con igual dureza a «una clase política que no tiene clase», según dijo por no cumplir con su promesa de verdad y justicia.
«Hoy ya no sólo somos víctimas de los terroristas, sino de los arquitectos de la impunidad activa», manifestó el religioso, en el más aplaudido discurso que tuvo el acto central por el sexto aniversario de la AMIA. Bergman dijo que «hoy aun vivimos en el orden de la casa de Caín; comenzó con un punto final, con una obediencia debida, con un indulto, que es la verguenza para los argentinos».
Se preguntó, asimismo, «cómo podemos hablar del orden en esta sociedad, no podemos decir que Argentina ni es nazi ni es antisemita, aun está llena de ellos, que fue su refugio, los importó de la Alemania nazi».
«No sólo es peligroso ser judío en Buenos Aires, sino parecerlo», dijo el rabino, quien se preguntó, haciendo referencia a una famosa frase del ex presidente Raúl Alfonsín, también presente en el acto, si «la casa está en orden?».
«La casa está en orden y ese orden se llama impunidad», se respondió dramáticamente.
El religioso Bergman dijo que «somos llamados hoy a romper pacíficamente y en un marco de la ley este orden perverso para poner juntos los argentinos las cosas en orden». Llamó a «no defender una clase política que no tiene clase» y advirtió que el orden constitucional debe servir «para edificar la casa, el estado de derecho, la independencia de los poderes».
Por su parte, la periodista Magdalena Ruiz Guiñazú, aludió al no esclarecimiento de los autores del brutal ataque, al señalar que «cuando una nación permite que los asesinos continúen en libertad a la sombra de la impunidad, florece ese amplio mundo que permite insertarse en la sociedad a los que disfrutan de dineros mal habidos». Finalmente, la ex integrante de la CONADEP, expresó: «Hay ciertas palabras que aun es menester recordar: «Nunca más».
(DYN)
De la Rúa: «Pondré el peso del Estado»
El presidente Fernando de la Rúa aseguró que pondrá «todo el peso del Estado y toda la fuerza en aras de contribuir a la investigación y despejar los interrogantes» en torno de la voladura de la mutual judía AMIA.
El presidente remarcó que no estaba molesto por el tenor de los discursos pronunciados durante el acto por el sexto aniversario del atentado terrorista y expresó que había tomado las palabras como «pedidos» que formulan los familiares de las víctimas.»Los oradores han expresado el sentimiento y el reclamo de justicia de la comunidad», dijo de la Rúa.
En clara referencia al discurso del rabino Sergio Bergman, el presidente De la Rúa dijo que ratificaba en su totalidad todas su palabras. «Ratifico que pondré todo el peso del Estado y toda la fuerza en aras de la investigación». (Infosic)
BUENOS AIRES. -En medio de estrictas medidas de seguridad, una multitud estimada en cinco mil personas, exigió a la Justicia que de una vez por todas esclarezca el brutal atentado contra la mutual judía AMIA y se castigue a los culpables, en un acto de hondo contenido emotivo, tal vez el más fuerte desde que ocurrió el ataque hace seis años.
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