Usaron balas de plomo para reprimir a los manifestantes
Lo informó ayer el fiscal que se ocupa de la causa.
NEUQUEN (AN).- Durante la represión del miércoles en el barrio Confluencia se utilizaron balas de plomo. Dos de las tres personas que resultaron heridas aún conservan los proyectiles en sus cuerpos, mientras que a la tercera el balazo le entró y salió. Ninguna corre peligro de muerte. La justicia ya ordenó el secuestro de todas las armas que utilizaron los policías que intervinieron en la batalla campal, y Asuntos Internos de la Jefatura inició una investigación.
La utilización de balas de plomo fue confirmada ayer a este diario por el fiscal Ignacio Cano, quien interviene en la causa. Aclaró que “investigaremos de dónde partieron los balazos, porque en este momento, con los elementos que llevo reunidos, no puedo decir si dispararon de un lado o del otro”.
La utilización de proyectiles de plomo por parte de la Policía para reprimir protestas sociales tiene un nefasto antecedente en la provincia: el asesinato de Teresa Rodríguez en Cutral Co, en 1997. Ese crimen, que está filmado y fotografiado, sigue impune.
En tanto, la situación en el barrio Confluencia sigue siendo muy tensa y ayer a la madrugada abundaron las escaramuzas entre vecinos encapuchados y policías ..
Los restos de Rubén Arias, el hombre que murió por las quemaduras sufridas durante el violento desalojo del lunes, serán inhumados hoy a las 11 en el cementerio del barrio Progreso. Ayer durante todo el día fue incesante el desfile de vecinos por el velatorio, en la capilla María de Belén de Confluencia. El obispo Agus-tín Radrizzani, que asistió durante la mañana, hizo una cita papal al referirse al caso: “una democracia sin valores se sostiene con violencia manifiesta y solapada” (ver aparte).
El Gobierno provincial, en tanto, mantuvo un perfil bajísimo. En Chos Malal, donde continúa de gira, el gobernador Jorge Sobisch anunció: “no voy a hacer declaraciones de ninguna naturaleza”. El miércoles, antes de conocerse el fallecimiento de Arias, había dicho que “hubo una decisión del juez que la policía debió respetar, y en función de esto se produjo un hecho lamentable. Si ha habido algún abuso la ley lo va a castigar”.
El ministro Jorge Gorosito, quien monitorea toda la situación desde esta capital, salió a respaldar el accionar policial: “sólo actuaron para resguardar la comisaría 19”, dijo.
Si bien una alta fuente del gobierno admitió que existe malestar por la forma en que se condujo el desalojo del lunes, descartó por ahora la posibilidad de que ruede la cabeza de algún jefe policial o funcionario.
Según la fuente, en el gobierno se estima que puede haber otro pico de tensión hoy, durante el entierro, pero se descarta que hacia el lunes la calma se habrá restablecido en forma casi total.
El bloque de legisladores de la Alianza pedirá hoy que el ministro Gorosito sea interpelado la semana próxima, para que explique por qué la policía actuó como lo hizo durante el desalojo del lunes y en los incidentes del miércoles.
Los exámenes médicos realizados a los tres heridos durante los incidentes del miércoles confirmaron lo que se presumía: en Confluencia se dispararon balas de plomo.
El fiscal Cano dijo que las radiografías efectuadas a los heridos permiten observan los proyectiles incrustados en sus cuerpos aunque no se logró determinar el calibre porque están deformados.
Las armas utilizadas por los policías el miércoles, cuando reprimieron una manifestación indignada por la muerte de Arias, ya están secuestradas.
En tanto José Luis Soares, director del Hospital Regional, y la médica Noemí Alemany, informaron sobre el estado de salud de los heridos.
Oscar Pereira, de 34 años, tiene un balazo en la región anterior del cuello. Un menor de 16 años presenta un balazo en el muslo con orificio de entrada y salida. Y Hernán Vidal, de 29 años, recibió un disparo en el hombro. A este paciente se le practicó “un by pass venoso. Tiene una lesión seria en la arteria subclavia, además el proyectil le fracturó el húmero”, explicó Alemany.
La causa que tiene en sus manos el fiscal Cano podría dividirse en varias. El funcionario ya recibió dos denuncias de vecinos que acusan a la policía de abuso de autoridad; ahora tiene que sumarle la utilización de balas de plomo en la refriega y los destrozos en la comisaría 19. También acumula expedientes de vecinos que dicen haber sido agredidos por patotas del barrio .
Además, Cano investiga las circunstancias en que se produjo la muerte de Arias.
El fiscal ya tendría en su poder un adelanto de la pericia efectuada por bomberos de la policía según la cual el fuego se inició dentro de la casa y antes de que ingresaran los efectivos encargados del desalojo.
Sin embargo, aún le falta conocer un testimonio clave: el de Ingrid Manríquez, la esposa de Arias. Esperará a que la mujer supere el estado emocional que atraviesa en este momento para citarla a declarar.
La multisectorial hizo responsable al gobierno
NEUQUEN (AN).- La multisectorial salió ayer a las calles de Neuquén para repudiar la represión policial en el barrio Confluencia. Los manifestantes responsabilizaron al gobierno provincial por la muerte del diariero Rubén Arias y exigieron la renuncia del ministro de Gobierno, Jorge Gorosito y de la subsecretaria de Seguridad, Alicia Comelli.
Unos 200 manifestantes se reunieron frente al monumento a San Martín ayer al mediodía para reclamar el esclarecimiento de la muerte de Arias, quien falleció el miércoles por la tarde, luego de sufrir quemaduras en el 60 por ciento de su cuerpo.
La manifestación convocó a agrupaciones por los derechos humanos, partidos de izquierda y distintos gremios que manifestaron su pesar por el trágico desenlace que tuvo el violento desalojo del lunes pasado en el barrio Confluencia.
“No importó la vida humana” y “dio la vida por una casa” fue una de las consignas que sonó con mayor fuerza entre la indignación y dolor que expresaron los integrantes de la protesta.
La movilización inició su recorrido frente al municipio neuquino y luego se trasladó a la Gobernación. A través de cánticos y pintadas los manifestantes descargaron su fastidio contra el gobierno neuquino por los violentos hechos que ocurren desde el lunes en la zona sur de esta ciudad que, en su opinión, se pudo haber evitado.
El gobernador Jorge Sobisch, Gorosito y Comelli, fueron el blanco de los airados reclamos. “La paz social se impone a palos”, fue una de las críticas que más se escuchó entre los participantes de la marcha.
Los cuestionamientos apuntaron contra el gobierno y también apuntaron contra el juez Roberto Abelleira, quien dio la orden de desalojo el lunes pasado contra 17 familias que usurparon las viviendas de un plan del IPVU que se construye en ese sector de Neuquén.
Sin embargo, tanto el gobierno como la policía acapararon la mayoría de las críticas. El primero por su pasividad para resolver el problema y los efectivos policiales por los excesos de un operativo que, a juicio de la multisectorial, motivó el violento incidente que cobró la vida de Arias.
“Primero está la seguridad de las personas y después los bienes”, dijeron los representantes del Polo Social.
La movilización se desarrolló sin incidentes y culminó en el barrio Confluencia cerca de las 14. Los manifestantes decidieron marchar hasta el barrio para solidarizarse con los familiares de Arias que velaban sus restos en la capilla del lugar. La columna de manifestantes permaneció en el barrio Confluencia por un par de horas.
Continúa la polémica
NEUQUEN (AN).- “Cada uno cumple con el rol que le asigna la ley, y los jueces cumplimos con el nuestro. Eso no es facilismo”, afirmó ayer el presidente de la Asociación de Magistrados y Funcionarios de la Justicia Neuquina Eduardo Badano.
“No quiero contestarle al ministro (de Gobierno) Jorge Gorosito ni entrar en una polémica que no conduce a nada. Estos temas merecen un análisis profundo que vayan más allá de la coyuntura”, agregó.
El miércoles, el ministro político del gobierno había afirmado que “los jueces tendrían que estar presentes en aquellos allanamientos en que se sabe que se van a encontrar una situación de tensión”.
También señaló que “cuando el operativo transcurre sin incidentes, el mérito es del juez, cuando hay inconvenientes la culpa es de la policía. Me parece una postura facilista”.
Al respecto, Badano explicó a “Río Negro” que presenciar o no un allanamiento queda totalmente a criterio del juez interviniente .
Y advirtió que “en algunos casos, el juez puede convertirse en testigo y hasta en víctima. Por eso no es recomendable que asista” a los operativos, ya que pierde objetividad y tendría que apartarse de la causa.
“Después de la masacre de Ramallo, hubo una recomendación a jueces y fiscales para que se abstuvieran de asistir a procedimientos de esa índole”, señaló Badano.
También recordó que “el juez actúa sobre hechos pasados. La prevención no es la tarea del Poder Judicial”.
Fuentes del gobierno también deslizaron que propondrán que en la reforma del Código Procesal se incluya un artículo que obligue a los jueces a asistir a los allanamientos.
“Cuatro o cinco por día”
Al respecto, Badano puso en duda la posibilidad material de cumplir esa obligación. “Cada día se libran cuatro o cinco órdenes de allanamiento. No creo que haya recursos humanos suficientes para que un juez presencie cada uno”.
El presidente de la Asociación de Magistrados ya había declarado, el día del desalojo en barrio Confluencia, que la orden judicial dictada por su colega Roberto Abelleira era jurídicamente irreprochable.
NEUQUEN (AN).- Durante la represión del miércoles en el barrio Confluencia se utilizaron balas de plomo. Dos de las tres personas que resultaron heridas aún conservan los proyectiles en sus cuerpos, mientras que a la tercera el balazo le entró y salió. Ninguna corre peligro de muerte. La justicia ya ordenó el secuestro de todas las armas que utilizaron los policías que intervinieron en la batalla campal, y Asuntos Internos de la Jefatura inició una investigación.
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