Varios aludes dejaron diez muertos en Colombia

BOGOTA (AP).- Una serie de aludes arrasaron con poblados y cultivos en el suroeste de Colombia, dejando un saldo de diez muertos y 37 heridos. Mientras, las cuadrillas de rescate continuaron ayer la búsqueda de unas 29 personas que desaparecieron.

El director de la Defensa Civil Colombiana, general Héctor Beltrán, informó ayer a la tarde que «en este momento hay más de un centenar de voluntarios, más otros de la Cruz Roja y de otros organismos que nos apoyan. Es un grupo muy grande el que continúa en la búsqueda».

Un total de ocho cadáveres han sido recuperados del lodo, según el más reciente informe oficial, pero socorristas luchaban por sacar del barro a al menos otros dos cuerpos sin vida que ya habían sido localizados, indicó el secretario de la Gobernación de Valle, Orlando Riascos.

Beltrán dijo que hay 29 reportados oficialmente como desaparecidos. Informes preliminares indicaban 39 desaparecidos pero muchos de los que figuraban en las listas aparecieron heridos o en casas de familiares. Entre los desaparecidos hay siete militares que controlaban el tránsito en la zona. La cifra de heridos asciende a 37, de los cuales 14 quedaron hospitalizados.

En total fueron devastadas tres aldeas ubicadas a unos 350 kilómetros al suroeste de Bogotá, de las que evacuaron a 590 habitantes por encontrarse en alto riesgo por la posibilidad de que continúen los desprendimientos del terreno, informaron las autoridades.

El presidente Alvaro Uribe y sus ministros de Protección Social, Transportes y funcionarios militares, civiles y de agencias oficiales involucradas en la atención de la emergencia, visitaban la zona del desastre para decidir las acciones para rehabilitar la vía y atender a los afectados.

Quince derrumbes

Beltrán explicó que la intensidad y persistencia de las lluvias saturaron los suelos arcillosos de la región, lo que provocó «15 derrumbes, cinco de ellos de gran magnitud… en un tramo de 15 kilómetros» sobre la carretera que comunica Cali con Buenaventura, el principal puerto en el Pacífico y una de las rutas de mayor importancia económica para e país.

Según Riascos, el comercio, turismo y el transporte son los sectores «gravemente» afectados por los deslizamientos; pero también identificaron daños considerables en la agricultura, ganadería, energía y telecomunicaciones.

El servicio meteorológico oficial pronosticó que las lluvias continuarán, por lo que las autoridades fueron alertadas por el eventual desbordamiento de ríos.

Numerosos derrumbes en vías del país complican el tránsito para millones de vacacionistas que aprovecharon el asueto de Semana Santa para salir de las ciudades a visitar áreas del interior.