Vasco solo nomás

Por Eduardo Gilimón

Entré al quincho y el gordo Boedo no me dio tiempo ni para cerrar el paraguas.

-¡Eduardito!… Venís de Bariloche… ¿Qué les pasó a los radicales?… ¡Ultimos!…

-¡Se olvidaron de ir a votar, gordo!… ¡Como no los pasaron a buscar, se olvidaron!

-¿Cómo que no los pasaron a buscar?

-Claro, gordo… El radicalismo rionegrino gana elecciones cuando tiene guita para alquilar todo lo que se mueva y cargue algo: taxis, camiones… volantas, jardineras y etc., etc… Pero como el radicalismo no tiene mosca, no hubo acarreo. Conclusión: perdió.

-¿Qué te dijo después de la paliza Jáuregui, el candidato radical a intendente?

-Sonreía como «La Gioconda»…

-¿Y Luisito Falcó, presidente de la UCR?

-Sonreía como una docena de «Giocondas»… es grandote…

-¿Y Oscarcito Machado? El lo prohijó a Jáuregui… ambos profesan devoción a Freddy… ¿Qué decía Oscarcito?

-También sonreía…

-¿Como «La Gioconda»?

-No, como un Buda juntando rencor… Esos que se encuentran en la espesura… sonriendo suavemente y mirando a ninguna parte.

-¿Pero qué te dijo Oscarcito de la derrota?…

-Nada. Viste cómo es su estilo cuando le preguntás algo… Te responde con una catarata de «¡Yo… eh… uh… claro… oh… eh… uh… las urnas… eh… uh… ah!»… Y de golpe, cual predilecto de la indignación, gritó: ¡traición!

-Lo traicionaron los radicales a Jáuregui, ¿no? -preguntó Ludovico.

-¡Con palmaditas propias de la mafia!… ¡Ustedes saben que nadie en Río Negro conoce más del estilo de la mafia que los radicales!… «¡Andá pibe, andá que la «Hermandad de la Boina Blanca» te sigue!», le dijeron los radicales al vasquito Jáuregui y el vasquito estrenó la candidatura saltando en un pie, con un chupa chupa en la boca, los bolsillos llenos de bolitas y el balero colgando del cuello… y alternando «Mambrú se fue a la guerra» con «La farolera»…

-¡Enternecedor!… ¡Lo largaron solo!… ¡Hasta Yrigoyen y Crisólogo Larralde recibieron la orden de no votarlo! -dije…

-Y el diputado Castañón, presidente de la UCR barilochense y veranista contumaz, ¿qué dice ahora?

-¡Que el partido puso toda la carne al asador!

-¡Sí, sí… toda! ¡Para festejar el triunfo del MUP, para eso puso toda la carne!

-¡Se borraron todos del apoyo a Jáuregui… Verani, Mendioroz, Chironi!

-¡Mirá que Mendioroz y Chironi hacen de la región andina un culto de la política! ¡Están siempre ahí! ¡Que se compran gorritos de lana, que hacen muñecos de nieve… que chocolate! -reflexioné.

-Yo sé por qué no fue Bautista a respaldar a Jáuregui -dijo el gordo Boedo.

-¿Por?

-No recordaba bien el camino… ¡Un olvido ante tanta preocupación del gobierno!

-¡Y Verani por qué no fue a Bariloche!

-¡Porque hasta el cerro Catedral le había advertido que si iba, le cortaba la ruta!… ¡Pero estuvo a punto de mandar un funcionario con reconocido consenso en la sociedad para que lo representara ante el vasco Jáuregui! -dijo «Parroquia».

-¿A quién iba a enviar?

-A doña Ana Mázzaro.

-En cambio la razón por la cual no fue «Nano» a Bariloche… bueno, tiene peso..

-¿Cuál es?

-Y… su formación marista-conventual le permite intuir que hay momentos, instancias, que de suceder, sólo pertenecen a Dios… y nadie más… nadie más debe estar en ese momento en ese lugar… donde se juega la gloria o Devoto… Incluso se lo dijo al vasco Jáuregui antes de las elecciones…

-¿Qué le dijo?

-¡Ni Dios te salva, vasco!… ¡Y yo a Dios no le hago la interna, vasquito!


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