Vendedores ambulantes invadieron la calle

BARILOCHE

El municipio reforzó la presencia de inspectores en la vía pública para fiscalizar los puestos ambulantes que se multiplicaron en los paseos céntricos y los circuitos turísticos más alejados y logró mantener despejado de vendedores el Centro Cívico. Pero no así las zonas aledañas y los paseos más alejados.

La secretaría de Desarrollo Economíco autorizó la instalación de puestos con oferta variada de los microemprendedores, que se sumaron como alternativa a la propuesta de la feria artesana de Urquiza, mientras la dirección de Inspección General obligó al retiro de los vendedores no autorizados.

El responsable del área, Oscar Cannizaro, señaló a este diario que desde el miércoles los inspectores intimaron al retiro de varios puestos no autorizados bajo advertencia de decomiso de la mercadería, pero que, en todos los casos, los vendedores se retiraron por sus propios medios.

El funcionario explicó que se retiraron los carritos de choripan y pochoclo de la plaza Expedicionarios al Desierto y se los reubicó en el zig zag de calle May, donde compartieron el espacio con la Ecoferia. Aunque el sabroso olor de las parrilas invadía el Centro Cívico.

La oferta gastronómica y artesanal de los puestos ambulantes se alternó con la propuesta más casera de varios grupos estudiantiles que vendieron pizzas, tortas y sandwichs para recaudar fondos para viajes de egresados.

Los operativos de control se concentraron en el área céntrica y dejaron liberada la oferta en los circuitos turísticos de la zona Oeste, donde artesanos de distintas disciplinas y aficionados improvisaron puestos en las banquinas de Bustillo y Circuito Chico.

Cannizaron reconoció que “en la ruta no se realizaron operativos porque no hay estructura suficiente”.

rionegro.com.ar