Videla y Suárez Mason no quieren ser juzgados afuera

El ex dictador Jorge Rafael Videla y el ex jefe del Cuerpo I del Ejército Guillermo Suárez Mason se negaron a ser juzgados en Alemania por sus responsabilidades en el homicidio de dos ciudadanos de esa nacionalidad.

El ex almirante Emilio Eduardo Massera, en cambio, no pudo ser interrogado por la justicia, ya que según un informe médico realizado en el Hospital Naval Pedro Mayo, donde se encuentra internado, «no se encuentra en condiciones clínicas de prestar declaración».

Los tres ex jefes militares, «con arresto preventivo» debido al pedido del exterior, junto al brigadier Ramón Agosti (fallecido) fueron requeridos por la justicia de Alemania para juzgarlos por los homicidios de Elizabeth Kaesemann y Klaus Zieschank, durante el último gobierno de facto.

Kaesemann tenía 29 años cuando desapareció el 24 de mayo de 1977, hasta que su cadáver fue hallado junto a otros 15 ejecutados en un predio en la zona de Monte Grande, en el conurbano bonaerense. Zieschank, de 24 años, habría sido secuestrado el 26 de marzo de 1976 en la localidad bonaerense de San Martín.

En ambos casos se trató de cuestiones políticas, de acuerdo al pedido de «arresto preventivo» con fines de extradición cursado por el magistrado de Nuremberg Franz Strohmaier.

Videla, asistido por su abogado Carlos Tavares, y Suarez Mason, patrocinado por el defensor oficial Gustavo Kollmann, expresaron su disconformidad a ser extraditados. En la audiencia «de identidad» ordenada por el juez federal Norberto Oyarbide (que actúa subrogando a su par Sergio Torres), Videla expresó además que el hecho es «cosa juzgada» y se expidió sobre la «falta de jurisdicción» de los tribunales de Alemania para juzgar episodios que habrían ocurrido en la Argentina.

Durante la audiencia de identidad o «de conocimiento», prevista por la ley 24.767 de asistencia penal entre distintos países, se le comunica a los detenidos la causa del arresto preventivo, recaudo que no se pudo cumplir en el caso de Massera debido al «comprometido estado de salud» del ex marino. Tras completar ese paso procesal Oyarbide, con la intervención de la secretaria federal María Eugenia Capuchetti, ordenó un oficio para que, vía Cancillería, se requiera a Alemania que envíe la documentación necesaria para proseguir con el proceso de extradición. Videla, Suárez Mason y Massera también cumplen prisiones preventivas dictadas en otras causas sobre apropiación y ocultamiento de menores y violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura militar. (Télam)