Video: se cayó el portón de una escuela sobre una niña y podría haber sido fatal

Sucedió el viernes en Neuquén. La pequeña terminó con una fractura de peroné que le podría haber cortado una arteria. Denuncian otros puntos de peligro en el establecimiento.

El viernes una niña de 10 años llamada Claribel terminó con una fractura de peroné porque en un recreo se le cayó encima uno de los portones de la Escuela 154, ubicada en el Parque Industrial de Neuquén. Afirman que el hecho podría haber tenido un desenlace fatal si el hueso cortaba una arteria.

La estructura que se desprendió es de caño y tiene de dos metros de alto por tres de ancho, según describió el vicedirector, Néstor Aguayo. Se cayó cuando la niña intentó cerrar el portón para que la pelota con la que estaba jugando no se escapara a la calle.

La directora, Irma Orellano, explicó que a fines de mayo el mismo portón se había caído sobre cuatro niños. Tres terminaron con raspones y uno con una lesión en el tobillo. La suerte de Claribel fue peor, fue enyesada de la cintura a los pies, y, en reposo total, espera una cirugía con la que volverán a unir su peroné.

La docente recordó que la primera médica que atendió a la niña, una profesional del centro barrial de salud, le explicó que el hueso podría haber cortado una arteria de la pierna, poniendo en riesgo total la vida de la niña.

El portón estaba atado con un alambre, a la espera de que lo volvieran a soldar, como se hizo cuando se cayó la primera vez. El problema fue que lo tuvieron que volver a abrir para permitir que se descargara la tierra necesaria para una obra y así quedó, a pesar de los reclamos de los docentes, hasta la tarde del viernes, después del hecho, cuando finalmente fue fijado.

Ahora esperan que el portón sea reemplazado y que se reparen todos los otros puntos de peligro que presenta el establecimiento no sólo para los estudiantes, sino para todo el barrio porque los vecinos lo utilizan diariamente para distintas actividades sociales.

Por ejemplo, la hoja de otro portón cuelga cerca de la cancha de fútbol, se registraron caídas en los dos metros que separan la última grada del anfiteatro hasta el piso y las rejas, que funcionan como barandas de las numerosas escaleras de la escuela, se mueven apenas se las toca.


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