Detienen al agresor de la joven baleada en una plaza de Viedma

Tiene 22 años y fue reconocido por la víctima que sigue internada en el hospital Zatti de la capital rionegrina.

Un joven de 22 años fue detenido como presunto autor del disparo que lesionó a una joven a primera hora de la tarde del miércoles en la plaza del barrio San Martín.

De milagro fueron lesiones leves lo que pudo ser una tragedia, como suele suceder cuando se le dispara a la cabeza a una persona. Este es el caso de una chica de 19 años que se recupera en el hospital Zatti luego de ser intervenida quirúrgicamente para extraerle el proyectil que quedó alojado en uno de sus pómulos.

Un joven de 22 años de apellido Pichiñán fue detenido como el presunto autor de la agresión. La grave situación se complicó aún más pasado el mediodía de del jueves cuando familiares del detenido agredieron en la vereda del hospital a la madre del novio de la chica que permanece internada en ese nosocomio.

La mujer agredida denunció penalmente el hecho y la fiscal de la causa, Paula Rodríguez Frandsen, dispuso custodia policial para la familia del novio y una prohibición de acercamiento a quienes protagonizaron la agresión en la vía pública.

Hoy sería la audiencia en la que serán formulados los cargos contra el imputado detenido.

El hecho ocurrió cerca de las 14 del miércoles cuando la chica caminaba por la plaza del barrio San Martín, junto a su novio. En ese momento descendió de una camioneta un hombre con un revólver con el que disparó más de una vez. Tres serían los proyectiles que gatilló. Uno de ellos quedó alojado en uno de los pómulos del rostro de la chica. En forma inmediata la joven fue trasladada al hospital Zatti donde fue compensada en la guardia y luego trasladada al quirófano para la extracción de la bala. Según la certificación médica la curación no llevará más de 30 días, razón por la cual las lesiones fueron consideradas leves.

El grave episodio fue denunciado luego de la intervención hospitalaria y por los mismos profesionales que atendieron a la víctima, perdiéndose un tiempo valioso para la investigación y la posibilidad de las pericias científicas que se trasforman en pruebas irrefutables.

Apenas advertida la Policía sobre lo ocurrido se accionaron las medidas de actuación frente a estos hechos como la comunicación inmediata a la fiscalía de turno y al Gabinete de Criminalística para levantar la mayor cantidad de huellas y elementos en el lugar del hecho.

A ello se sumó que el primer testimonio recibido del novio de la joven herida fueron aportados datos insuficientes que no alcanzaron para direccionar la investigación. Fue la víctima, una vez autorizada por los médicos y varias horas después del hecho, la que habría aportado datos certeros como la identidad del agresor, quien habría mantenido con la joven una relación sentimental anterior a su pareja actual.

Además, Pichinán habría protagonizado actitudes de agresión anteriores con el novio de la joven pero ninguna como esta última en la que utilizó y accionó un arma de fuego.


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