Weretilneck no acepta «imposiciones» por el humo

CIPOLLETTI (AC).- La polémica comenzó a gestarse hace algunos días y tomó más fuerza ayer con los dichos del intendente Alberto Weretilneck. «No voy a aceptar que a los cipoleños se les venga a imponer algo por el impacto que produjo el Concejo Deliberante de Neuquén», expresó. Fue luego de que se informara que el martes, Darío Martínez, el edil impulsor de la ordenanza que prohíbe fumar en espacios cerrados de acceso público de la vecina ciudad, vendrá a reunirse con sus pares de Cipolletti para que este tipo de normas «se apliquen en forma regional».

«No sé qué va a hacer el Concejo Deliberante. Mi opinión es que para negociar la aplicación de la ordenanza hay que acordar todo. Estaremos de acuerdo en aplicar una ordenanza similar a Neuquén siempre y cuando discutamos el horario de cierre de los boliches, alcohol, taxis, transporte, todo», agregó Weretilneck en su programa radial.

El tema empezó a sonar hace días. «Si Cipolletti era conocida como el 'dormidero' de Neuquén, ahora se va a conocer como el 'cenicero'», se quejó más de un vecino, al ver que varios fumadores cru

zaban el puente para instalarse en bares y cafés cipoleños.

Weretilneck había expresado su postura a favor de impulsar otro tipo de medidas para solucionar el problema de fondo: que la gente deje de fumar. Pero no se había metido demasiado en el tema. Hasta ayer.

«Si Neuquén ahora tiene problemas con la aplicación de la ordenanza no puede pretender que Cipolletti la aplique taxativamente para resolver el inconveniente político que tiene», empezó diciendo. «Ahora quieren disminuir el impacto en la sociedad neuquina, diciendo 'no, Cipolletti también se suma'», siguió expresando ante el micrófono. Su opinión estaba relacionada con el anuncio de una reunión para el martes a las 10, entre el concejal Martínez, que impulsó la ordenanza en Neuquén, y los ediles de la ciudad.

Martínez dijo que mantendrá un encuentro primero con los representantes de la Concertación en el Legislativo municipal y luego con el resto de los concejales apuntando «a que este tipo de ordenanzas se apliquen en forma regional». Fue por eso que reaccionó Weretilneck, sumando otros temas «regionales», como el conflictivo y siempre latente de la circulación de los taxis entre las dos ciudades.