Josefina empezó a dibujar recetas porque no sabía cocinar: así nació un éxito editorial

Gentileza

Su bio dice que Josefina Jolly nació en Buenos Aires en 1985 y que “mientras trabajaba en una aerolínea usaba sus horas de almuerzo para salir a dibujar y al salir asistía a clases de dibujo”. En el 2014 comenzó a ilustrar recetas de cocina para ayudarse a aprender a cocinar de un modo casual: ya se van a enterar cómo fue. En el 2015 seleccionó sus mejores dibujos y las publicó en “Cocinar y Dibujar”. El año pasado publicó su segundo libro 313 Dibujos de Buenos Aires y este año lanzó el libro-libreta Beber y Dibujar, que es un boom de ventas.

“Trabajé 5 años en Sky Airline como ejecutiva de cuentas corporativas, gracias a una campaña de crowdfunding en Idea.me edité un libro de recetas ilustradas que se llama Cocinar y Dibujar y ahora hago eso, cocinar y dibujar y hacer ilustraciones freelance”, comenta Jolly.

Estudió la licenciatura en Turismo, Turismo y Hotelería en la Universidad de El Salvador. También egresó del Ott College como técnica superior en Hotelería, Hotel Management. Cursó el bachiller en Las Marías, con orientación en Economía y Gestión de las organizaciones. Como se ve, formación no le falta a la chica.

– Josefina, ¿cómo es que habiando estudiado hotelería llegaste al dibujo?

– En mi caso haber estudiado hotelería y turismo me permitió viajar y tener un trabajo estable que después use de plataforma para empezar a dibujar, y también me acercó a la arquitectura de Buenos Aires, me hizo poner el ojo en la ciudad y aprender sobre su historia de una forma que no sé si hubiera sido posible estudiando otra carrera. Tu formación académica no tiene que ser necesariamente tu profesión, el crossover entre profesiones es cada vez mas algo de todos los días.

– ¿Desde siempre dibujás?

– No, dibujaba cuando era chica y cuando fui creciendo lo abandoné, como todos los chicos. Retomé el dibujo a los 28, medio de casualidad. Iba a un taller de escritura después de mi trabajo en una aerolínea y un verano termino el taller de escritura y empezó en el mismo lugar uno de dibujo, y para no quedarme sin hacer nada en enero en Buenos Aires, me anoté.

– Siempre contás que empezaste a ilustrar recetas de cocina para aprender a cocinar, en el 2014. En el mundo de la ilustración te va fantástico, y en la cocina, ¿aprendista a cocinar?

– Sí, el dibujo fue una forma de traducir la cocina a mi idioma, dejé de tenerle miedo, si podía convertirlo en un dibujo de un hoja, entonces no era tan difícil hacer una paella.

– “Cocinar y dibujar” fue tu primer libro. ¿Cómo llegaste a juntar esos apuntes, esas preciosas láminas a un libro?

– Fui dibujando las recetas que hacían mis amigos, o en mi familia, se fueron acumulando, hoy tengo muchas más de las que aparecen en el libro y las comparto en mis redes sociales.

La empresa que le publica a Josefina, Galería Editorial, relata que que Cocinar y Dibujar nació en una libretita de paso, cuando una amiga invitó a cenar a Josefina a su casa. “El menú era una tarta de puerros, y al parecer estaba tan deliciosa que le pidió a su amiga que le explique la receta. Para no olvidar ningún paso ni ingrediente, Josefina la dibujó. Como el dibujo había quedado muy lindo, y también quería seguir incrementando sus posibles menúes, continuó buscando y dibujando recetas. Cocinar y Dibujar es esa libreta llena de recetas que recibía tanto de sus amigos y como también de desconocidos de las redes sociales. Algunas son sencillas, otras un poco más complicadas. Todas testeadas en el papel y en la cocina de Josefina”.

– Hacés ilustraciones de gastronomía para distintas marcas. ¿Cómo se fue planteando la ilustración como modo de vida, como instrumento de trabajo?

– La trancisión del dibujo de hobby a medio de vida fue lenta pero constante, una vez que empecé a subir mis dibujos a las redes sociales, empezaron de a poco a pedirme trabajos, chiquitos, otros más grandes, a veces tenía muchas cosas para hacer y otras menos, pero de a poco el volumen creciendo y se fue estabilizando.

– Tu último libro es Beber y dibujar es un boom de ventas, por estas semanas.

– Quienes compraron mi primer libro fueron amigos, conocidos de las redes sociales y desconocidos que vieron el proyecto de Ideame en internet y decidieron colaborar, la mayoría no por un interés particular en la gastronomía o la ilustración, sino más bien por el lado emprendedor de decir trabajo 9 hs en una oficina pero me encanta dibujar y quiero hacer este libro, me ayudás? En el caso del segundo libro, “313 dibujos de Buenos Aires”, la cosa cambió, es un público diferente, principalmente arquitectos, extranjeros y amantes de la ciudad. Mis amigos ya no me compran libros, “ya tenés tus fans, arréglate sola Jolly” me dicen siempre, y está perfecto. Estoy muy agradecida con todas las personas que colaboraron en mi campaña de crowdfunding y me dieron el empujón inicial que necesitaba para salir de la oficina.

– Gastronomía, arquitectura… ¿Cuántos intereses distintos tenés al mismo tiempo? ¿Un interés lleva a otro en tus ilustraciones?

– Tengo muchos intereses, los animales, los viajes, el espacio, el cine, las hamburguesas…. la cocina y la arquitectura son los que se convirtieron en libros, pero no son los únicos ni los más importantes. Lo que me permite la ilustración es elegir un tema, explorarlo y después contarlo a mi manera.

– ¿Qué diferencia hacés entre ver, mirar y observar?

– Me considero una persona muy observadora, pero no se puede observar todo todo el tiempo, al igual que cómo pasa con una cámara de fotos, cuando hacés foco en algo dejás desenfocado lo que está al rededor, la observación es necesariamente selectiva. Así como me conozco de memoria los balcones de algunos edificios, me olvido el nombre de la calle.

– ¿En qué ayuda una ilustración a nuestras vidas?

– La ilustración hace todo más lindo, más abordable, ayuda a contar historias, a mi me ayudó a contar la mía.

– ¿Podrías comunicarte con el resto de la gente solo con dibujos?

– ¡Eso sería genial!

– ¿Qué ilustrador/a te gusta, te fascina, te inspira?

– Me gustan mucho @furrylittlepeach y @frannerd por sus dibujos pero principalmente porque comparten en internet (Instagram, YouTube, etc) el proceso de lo que hacen y sus vidas intentando vivir de dibujar, creo que eso completa el círculo de la ilustración y por eso las admiro aunque sus dibujos no sean de esos que están en el MOMA en Nueva York.

– En la cocina, ¿qué plato te gusta hacer más?

– Hace poco aprendí a hacer arepas y ahora soy fan

– ¿Y de las bebidas o aguas saborizadas, cuál te engancha más?

– Mi trago favorito es el gin tonic, con pepino o bayas de enebro.

Te va a interesar: Claudia Svampa y Mercedes Andrada, amigas y emprendedoras marcan el rumbo de “Phez”, en Neuquén