Análisis: Ya no son oficialismo ni una oposición con fuerza
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El intendente electo Mariano Gaido tendrá que apelar a consensos en el Deliberante. Foto: Yamil Regules.
Los resultados en el Concejo Deliberate fueron para el espacio político que lidera el actual intendente Horacio Quiroga un golpe que va a ser muy difícil de digerir.
No solo perdieron la jefatura de la ciudad luego de 20 años de dominio, sino también no lograron armar estrategias sólidas para convertirse, dentro del Concejo, en una oposición fuerte, capaz de darle más de un dolor de cabeza al nuevo oficialismo y construir desde ese lugar un poder propio.
La paridad para la primera minoría y el oficialismo disparará peleas intestinas por ganar “como propios” al resto de las fuerzas políticas que integran el órgano deliberantivo.
Tamaña empresa tendrá el Frente de Izquierda de los Trabajadores que siempre está en la vereda de enfrente de todos los oficialismos y jamás aceptaría (al menos eso parecería) sumarse o votar igual que “la derecha que representa Cambiemos en la ciudad”.
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