Boca sacó un empate de la galera

Después de haber sido superado hasta con amplitud en muchos pasajes del juego, Boca, mediante un penal en el último tramo del partido, consiguió empatar en un gol ante Independiente, que continúa con su racha adversa y está a punto de concretar la peor campaña de su historia.

El equipo de Avellaneda impuso el ritmo del partido prácticamente desde el comienzo y hasta el final, pero sus dificultadas para definir en el área rival lo privaron de obtener lo que debió haber sido su primer triunfo en dos meses. Los locales se habían puesto en ventaja en la primera mitad del partido con un zurdazo alto, violento y preciso del «Pocho» Insúa.

Mejor Independiente en casi todo el primer tiempo ya que ganó en todo momento el manejo de la pelota en la mitad de la cancha. Lo del «Rojo» se basó en el muy buen trabajo de Ríos por la derecha, con Franco recuperando y con Insúa, discontinuo, pero marcando diferencias cada vez que la redonda pasaba por sus pies. El problema del equipo del «Tolo» Gallego fueron los últimos metros de la cancha.

Por su parte, Boca se mostró firme atrás, pero de la mitad de la cancha hacia adelante fueron esfuerzos dispersos. Llamativamente, al equipo del «Maestro» Tabárez le costó tener la pelota, así y todo, a los 14, un remate de Giménez obligó a Sala a una gran atajada.

El local contestó recién a los 23. Proyección de Donnet, remate de Insúa y una muy buena tapada de Abbondancieri.

A los 40, el predominio del «Rojo» se notó en la red. Gran jugada individual de Ríos por la derecha dejando a tres hombres en el camino, llegó al fondo, la tocó atrás para Insúa que definió con un zurdazo muy fuerte.

La segunda parte se planteó muy similar a la primer tiempo porque Independiente continuó controlando la mitad de la cancha y desde allí dirigió el juego hacia el área de Abbondancieri durante la mayor parte del desarrollo.

A Boca lo sostuvieron la seguridad de su arquero y el reaparecido Burdisso, ambos de buenos trabajo. Cuando entró Villarreal en lugar del tibio Fabbro la visita alcanzó algo más de presencia en la zona media.

Una acción individual de Giménez sobre la izquierda determinó el penal cometido por Milito que convirtió otro de los que reaparecieron, Guillermo Barros Schelotto -un eterno verdugo de los «rojos»- quien produjo algunas acciones interesantes pero de nuevo estuvo muy perdido en rencillas con el público rival y con el árbitro.

La igualdad final fue un premio excesivo para lo poco que Boca le aportó al espectáculo y castiga con rigor la indefinición de Independiente en el área rival. (AR y DyN).

Tabárez culpó de todo a los altibajos

Oscar Tabárez comentó, a modo de balance sobre la producción de su equipo en el torneo, que «tuvimos momentos buenos, tuvimos momentos de los otros. Quizá fuimos irregulares y por ahí se explica que no hayamos estado más arriba. Ciertos momentos malos nos pusieron en la situación de perseguir».

«Aunque en algún momento lo hicimos con una racha importante de victorias consecutivas -recordó-, no dio como para alcanzar o aproximarnos a las últimas fechas con la misma distancia. Esa distancia aumentó y más allá de que se mantuvo cierta chance matemática por los partidos que perdió el puntero, la cosa se había puesto difícil a partir de aquel empate con Chicago».

Respecto del empate, expresó Tabárez que «en el primer tiempo jugamos por debajo del buen nivel, en el segundo el equipo mejoró mucho. Lo emparejó y se buscó. Lo de la justicia no lo sé, los resultados son los resultados». (DyN).

Foto: Gabriel Milito se adelantó a la acción de Barros Schelotto, quien queda dolorido en el piso