La luz es mucho más cara en Neuquén que en Cipolletti

El incremento de las facturas de luz es un dolor de cabeza en todo el país. Lo llamativo del caso es que en la región existe una brecha tarifaria más que importante con sólo cruzar el puente que une Cipolletti con Neuquén. Para el caso, y de acuerdo a los valores que se desprenden de los cuadros tarifarios de las distribuidoras eléctricas regionales –cálculos sin impuestos–, un usuario residencial tipo de la ciudad capitalina puede llegar a pagar hasta un 60% más que su “vecino” en la localidad de Cipolletti. Esa diferencia se torna aún más importante en el ámbito comercial, incluso llegando al 100%.

Hace un par de días, el diario La Nación publicó un informe que ubicó –según datos de los últimos cuadros tarifarios de las distribuidoras eléctricas– a Neuquén en el podio de las provincias con facturas de luz más caras. Según el informe, en la capital neuquina cuesta 810 pesos el consumo mensual de 264kHw/mes, mientras que en Río Negro 527 pesos. Solamente las tarifas en Buenos Aires y Córdoba superan a las de la provincia vecina. Río Negro se ubica en el puesto 18.

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Este matutino chequeó la información con los cuadros tarifarios de las distribuidoras eléctricas que operan en las dos provincias. Poniendo como parámetro un consumo mensual de 200 kw/h mensual –lo que gasta una casa tipo en estas dos ciudades–, la distribuidora Edersa cobra 450 pesos, mientras que en la cooperativa CALF 725 pesos.

Las diferencias se acentúan cuando los consumos van en ascenso, y en la categoría comercial se disparan. Para el caso, un negocio de barrio, que consume 750 kw/h por mes, paga en Neuquén capital casi 3300 pesos; en Cipolletti 1650 pesos; en Bariloche algo más de 2500 pesos; y en el interior de Neuquén, alrededor de 2300 pesos. Un comerciante neuquino pagó en marzo de 9.300 pesos por un consumo de 1.125 kHw/mes.

Una fuente especializada en regulación eléctrica explicó que “todas las distribuidoras eléctricas compran la energía al mismo precio , por lo que la diferencia en las facturas radica en el costo que tiene cada distribuidora para mantener el servicio, hacer operaciones, invertir, pagar sueldos y obtener su rentabilidad”.

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