¿Femme fatal o intelectual?

Como la función de la moda no es la de disfrazar, los expertos explican qué modelo queda bien con qué tipo de cara. Las gafas de pensador: Johnny Depp y Woody Allen ya llevan puestos los lentes de pasta desde la década de los 80. Expertos en moda los redescubrieron en el 2011 y desde entonces vienen promoviendo su uso. Este modelo es absolutamente imprescindible, dice la asesora alemana en óptica Kerstin Kruschinski. Las gafas de pasta se pusieron de moda por primera vez en la década de los 40 y las llevaron sobre todo los intelectuales. Hoy, están en onda nuevamente, tanto para hombres como para mujeres. “Las gafas de pasta favorecen sobre todo a las personas cuya forma de la cara es cuadrada, ya que tienen el efecto de suavizar los bordes del rostro”, dice la personal shopper Sonja Grau. En términos generales, sin embargo, son idóneas para diferentes tipos de cara, ya que se integran de forma muy armónica en la anatomía. Las de ojo de gato (en inglés: cateye) no se ajustan al carácter y el estilo de todo el mundo. Estas gafas llamativas, con la montura y los cristales en forma precisamente de ojos de gatos, tienen su origen en la década de los 50. “Les quedan bien sobre todo a los tipos femeninos”, dice la experta Kruschinski. Las mujeres que prefieren un look deportivo deberían elegir las gafas preferidas de los hombres: las estilo aviador. “Con ellas pueden resaltar su look deportivo y desenfadado, pero también pueden crear una ruptura en una imagen femenina y romántica”, dice Kruschinski. Para el óptico alemán Jürgen Meyer, son algo más que un clásico de la moda: “Gracias a su forma y a los grandes cristales, los lentes de aviador protegen muy bien contra la radiación ultravioleta”. Por otra parte, este año todo está permitido en materia de colores. Sin embargo, la mayoría de los diseñadores limitan los colores extravagantes a las monturas y utilizan para los cristales colores naturales como el marrón, el gris o el verde oscuro, explica Kruschinski. Algunos modelos se salen de lo común y llaman la atención por sus cristales de color rosa fucsia, verde hierba o azul. Meyer advierte, sin embargo, sobre el peligro de una distorsión de colores: “Las gafas de sol con cristales de color rosa fucsia, azul o violeta no son adecuadas para conducir”. Kruschinski recomienda a los que no quieren cristales de colores chillones o que consideran los tonos naturales demasiado aburridos que elijan espejados. Estos lentes tienen dos ventajas: reducen la cantidad de luz que cae sobre el ojo y ocultan completamente los ojos, para tener la perfecta cara de póquer. (DPA)

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