Gastronómicos quieren voz en la categorización

SAN CARLOS DE BARILOCHE (AB).- Mientras sigue abierto el debate sobre el futuro régimen provincial de categorización hotelera, el sindicato de trabajadores gastronómicos reclamó que a la hora de calificar se otorgue «primordial importancia» a la calidad de los servicios.

En ese rubro estarían contemplados la capacitación e idoneidad del personal, que hasta ahora no son tomados en cuenta para definir la categoría de un establecimiento hotelero.

El asesor del gremio, Ovidio Zúñiga, sostuvo que el decreto 657/03 por el cual gobierno provincial intentó fijar pautas de calificación para los hoteles «es inaplicable» y propuso avanzar cuanto antes en su redefinición.

En esa tarea se encuentra desde hace meses el Concejo Deliberante local, donde hasta ahora no habría consenso para incorporar los planteos del gremio. Por eso la UTHGRA anticipó que de no tener respuesta positiva en el ámbito del municipio llevarán sus exigencias a la Legislatura provincial.

Zúñiga explicó que el decreto arrastra una seria contradicción en razón de que en sus fundamentos hace expresa referencia a la calidad del servicio como requisito básico para equiparar los hoteles locales con los de los principales centros turísticos del mundo, pero en el articulado el tema desaparece.

Condiciones del personal

También denunció que «existen sectores empresarios que apresuran la aproba

ción de la norma con la única y excluyente finalidad de acceder al crédito BID» y son reticentes a aceptar que la legislación precise las condiciones del personal hotelero.

El gremio se quejó de que «salvo honrosas excepciones el servicio (en los hoteles y restaurantes de Bariloche) se brinda en forma deficiente y en muchos casos no se condice con el precio dólar que cobran».

Zúñiga citó el caso de hotel Nevada, que despidió recientemente a una gobernanta de acreditada experiencia luego de rechazarle varias propuestas para aumentar la dotación de personal en las áreas donde era necesario brindar un mejor servicio.

Entre otras observaciones, la UTHGRA señaló que los establecimientos de turismo estudiantil tienen calidades de prestación muy diferentes y algunos «son un verdadero fraude a la actividad», mientras que existen también «bungalows y hoteles de 1 y 2 estrellas que inexplicablemente siguen ocupando personal de los planes jefas y jefes de hogar».

El dirigente gremial explicó que el turismo «es una actividad donde el trabajador está estrechamente ligado con quien recibe el servicio» y la poca importancia que se le concede «es uno de los errores de siempre» que dificultan el crecimiento del sector.

Por eso sostuvo que podría valorarse en la determinación de la categoría de un hotel el requisito de que cuente con un 40 por ciento de su personal «con trayectoria avalada por empresas del sector» y otra proporción similar de «diplomados en la escuela de hotelería», reduciendo al mínimo el número de empleados «que llegan a hacer la temporada y no tienen idoneidad ni experiencia».