Las lluvias y nevadas de primavera mejoran el panorama hídrico de Neuquén

Las lluvias y nevadas que vienen caracterizando esta primavera en Neuquén son una buena noticias en términos hídricos, ya que aportan al caudal de los ríos Neuquén y Limay.

La sequía es una realidad que afecta la cuenca desde hace años, por lo que el seguimiento del aporte de agua se hace fundamental. En este caso, el agua y la humedad de agosto llegaron recién en septiembre y octubre.

“Ha venido un niño tardío” explicó el referente por Neuquén de la Autoridad Interjurisdiccional de Cuencas (AIC) y presidente de Emprendimientos Hidroeléctricos (Emhidro) Elías Sapag.

El funcionario aclaró que si bien son niveles sobre la media, no se trata de cantidades extraordinarias pero sí muy buenas. Además recordó que aun no han comenzado los deshielos.

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“Tenemos el 80% de la media”, detalló Sapag y aclaró que no elevará el caudal erogado a no ser que se solicite porque el río Negro tenga bajo nivel. El referente de la AIC explicó que actualmente el Limay se mantiene en 900 metros cúbicos por segundo y el Neuquén en 300, con una erogación de 350 en el primer caso y 140, en el segundo.

Sin desmedro del impacto positivo de las condiciones climáticas actuales, en sus declaraciones a radio Universidad Calf, Sapag fue cauto y recordó que los deshielos duran solamente cinco meses, justo en la temporada de mayor demanda por el riego y el consumo eléctrico de las ciudades.