Neuquén analiza diferir la segunda aplicación con las próximas vacunas

Ahora esperan la Sputnik. Con las próximas entregas, los ministerios de Salud analizan diferir las segundas dosis para vacunar a la "mayor cantidad posible" de primera aplicación con la dotación en existencia.

«Nosotros tenemos que gestionar lo que tenemos», dijo ayer la ministra Andrea Peve al regreso de una de las primeras reuniones presenciales con sus pares de otras provincias en el Consejo Federal de Salud (Cofesa).

La ministra no contaba hasta hoy con un dato certero de cuántas dosis de Sputnik V llegarán a la provincia de las 330.000 que trajo de Rusia el viernes el gobierno nacional. «El proceso implica que entre 4 y 7 días estén remitiendo» la dotación para Neuquén, indicó.

Agregó que debido a que hay una faltante mundial de vacunas y con lo que el país puede conseguir según los contratos firmados, los ministerios de Salud analizan vacunar a la mayor cantidad de gente posible con las dosis que están a la espera de recibir desde los laboratorios de China, dar a todas las personas una primera aplicación y esperar para vacunar con la segunda dosis cuando lleguen otros embarques, en forma diferida.

Peve dijo que la entrega de vacunas a cuentagotas fue uno de los análisis que realizaron en el Cofesa. Agregó que «el faltante es en todo el mundo, en Argentina alcanzamos a un 6,7% de vacunas de las que se contrataron, mientras en otros países es de 1% o menos».

Informó que la semana que viene el gobierno nacional buscará otro cargamento de unas 3 millones de dosis de la vacuna Sinopharm (de laboratorios chinos), con una aplicación recomendada sólo para menores de 60 años.

Aseguró que en el Cofesa no se habló de poner en marcha medidas de confinamiento, sino de exigir el cumplimiento de protocolos conocidos para frenar los contagios.

En declaraciones a LU 5, Peve destacó que ya se habían aplicado en Neuquén un total de 60.200 dosis, con una cifra de 98% de personas vacunadas. De ese total, 47.100 fueron personas inoculadas con primeras dosis y 13.100, con segundas dosis (proceso completo) contra el coronavirus.

«Cualquier tipo de vacunas contra el COVID -19 no erradican la enfermedad, solo disminuyen la mortalidad por coronavirus y las formas graves de la enfermedad, por eso es que nos concentramos en las personas que tienen mayor riesgo y las de más edad», sostuvo.

Recordó que si bien la mayor cantidad de contagios se produce entre la población joven, «es un porcentaje menor al que les impacta fuertemente, por eso tenemos que maximizar en aquellas personas en las que el impacto es más alto, o puede ser mortal», reiteró.

En base a éste análisis de frenar la mortalidad de personas mayores o con comorbilidades, es que se analizó en el Cofesa «diferir la segunda dosis; es una recomendación fuerte que está analizando un comité de expertos, pero es una discusión que aún no está cerrada. Es un análisis que hacen en inmunizaciones, y que analizan la experiencia del Reino Unido; es decir, una vez que llegan al país las dosis, administrarlas a la mayor cantidad de personas posibles y con preferencia a las de mayor riesgo», insistió.

Quieren controles del aislamiento de los viajeros

Peve aseguró que las y los ministros de Salud del país saben de que Argentina tendrá una segunda ola de contagios. Agregó que se analiza con preocupación situaciones graves de transmisión en Uruguay, Chile y Paraguay con circulación de nuevas cepas agresivas, entre las que identificó la «cepa británica y la de Manaos, que ya están en el país».

Pero enfatizó que «no hablamos ni de cerrar, ni de medidas de confinamiento» en el Cofesa. Aseguró que ante la seguridad de que habrá una nueva ola de transmisión masiva del coronavirus por cepas más contagiosas, «tenemos que disminuir la transmisión con medidas que conocemos: evitar las aglomeraciones, frenar la circulación, ver el incumplimiento que se hace del uso adecuado del barbijo y de los distanciamientos».

Indicó que una de las medidas que buscarán de estricto cumplimiento, es que las personas que regresan por Ezeiza desde el exterior, realicen los 10 días de aislamiento. «Las fronteras están cerradas, las personas que están regresando de viaje, deben cumplir con el aislamiento de 10 días y los protocolos. Sabiendo cómo nos fue el año pasado, y entendiendo que la economía no se puede frenar, hay que tener las condiciones de previsión para que los chicos puedan seguir yendo a las escuelas y tener abiertas las actividades», reafirmó.


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