Neuquén: hubo un feroz intercambio de disparos
Así lo relataron los policías que intervinieron en la investigación del crimen, ocurrido el 23 de noviembre del año pasado.
Muerte en el inquilinato
NEUQUÉN (AN).- El pasillo y el patio interior del inquilinato de la avenida Olascoaga al 1.000 donde cayó muerto Víctor Barloa (41) quedó regado de vainas servidas y esquirlas de los proyectiles percutados. Los impactos quedaron reflejados en las paredes y columnas. También hallaron una bala sin disparar entre las ropas de la víctima.
Los relatos que dieron ayer los policías que intervinieron en la investigación del crimen, ocurrido el 23 de noviembre del año pasado y que tiene como único imputado a Claudio Álvarez (38), evidenciaron que el intercambio de disparos fue feroz.
En la segunda jornada del juicio el oficial Pablo García y el subcomisario Sergio Llaytuqueo dijeron que en el médico policial que concurrió al escenario del hecho informó que Barloa tenía 14 impactos de bala.
También recibió al menos un tiro el dueño del inquilinato, César Nieto (41), quien alcanzó a protegerse detrás de macetas.
Según los testimonios escuchados hasta el momento, Nieto era el blanco a quien buscaba el acusado.
César Nieto, cabe señalar, fue ultimado a tiros dos meses después en Mendoza.
Su viuda dijo que los agresores habían sido mandados por Álvarez para que lo ejecutaran.
Muerte en el inquilinato
Registrate gratis
Disfrutá de nuestros contenidos y entretenimiento
Suscribite por $1500 ¿Ya estás suscripto? Ingresá ahora
Comentarios