Robaron la bomba de agua que abastecía a la ciclovía y destrozaron luminaria en Fernández Oro
Detallaron que además del robo, se registraron destrozos en el Monumento a Malvinas ubicado en el Parque Central.
El reclamo fue realizado por el gremio ATE. Foto: Archivo.
Un nuevo hecho de vandalismo se registró este martes en Fernández Oro. La propia municipalidad confirmó el robo de la bomba de agua que abastecía al sector de la ciclovía y diferentes destrozos en la ciudad. Hace una semana ocurrió un hecho similar en una escuela de General Roca.
En un comunicado informaron que «lamentablemente nuevamente tenemos que informar sobre actos de vandalismo en nuestra ciudad«.
Según detallaron, la bomba robada abastecía al sector desde el Puente 83 hasta la estación YPF ubicada en uno de los ingresos principales a la ciudad.
Además explicaron que se observaron destrozos en la luminaria pública ubicada en el Monumento a Malvinas que se encuentra en el Parque Central.
«La semana pasada, se robaron y rompieron las rejillas de las boca tormentas de calle Yrigoyen. Las cuales ya fueron reemplazadas», sumaron en el reclamo por los hechos de vandalismo.
Desde el Municipio, solicitaron a todos los vecinos tomar conciencia sobre los elementos que se sirven para mantener los espacios públicos en condiciones.
Recordaron que este tipo de actos son sancionados con multas en el marco previsto por el código de faltas Municipal Ordenanza 564-CDM/16.
Hace una semana, destrozaron y robaron en una escuela de General Roca
Desde la Escuela 317 indicaron que los ladrones se llevaron un televisor de 50 pulgadas, computadoras, consola de sonido y otros elementos. El atraco ocurrió sobre la calle Nicaragua 743.
“Muchos de esos elementos, los provee el Estado pero otros se compraron con recursos propios que fueron generando las docentes y las familias de los chicos con rifas, y bingos. La última adquisición fue de un televisor de 50 pulgadas nuevo, reponerlo va a llevar mucho tiempo”, reflexionó el director del establecimiento Carlos Tolosa.
Tolosa señaló que los delincuentes habrían ingresado por el patio interno del Jardín 33 que da a la sala de informática y a la biblioteca. Allí rompieron el techo para finalmente entrar y robar el equipo.
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