Ya son siete las ciudades de Río Negro donde podrían cerrarse las oficinas del Correo Argentino
Luego del reclamo de intendentes y del gremio de trabajadores de la empresa estatal, desde JSRN anunciaron gestiones para evitar perjuicios.
El jueves concentrará frente a la oficina de Correo Argentino en Fernández Oro. Foto: archivo
Son siete las localidades rionegrinas que están a punto de quedarse sin oficinas del Correo Argentino y el sector político empezó a manifestarse, para reclamar al gobierno nacional que evite perjuicios a los trabajadores de la empresa y a los usuarios de la provincia.
Fernández Oro, Sierra Grande, Chimpay, Chichinales, Ingeniero Huergo, Barda del Medio y Cervantes aparecen como los primeros puntos con cierre de sucursales inminente, aunque los rumores dentro de la propia empresa indican que la lista podría crecer en los próximos días.
“La motosierra llegó a Cervantes”, reprochó esta mañana Claudia Montanaro, jefa comunal del PJ que se expresó ayer ante el “retroceso” que significaría la decisión, basada desde su punto de vista en un modelo que levanta “banderas de humo de déficit, ñoquis, o argumentando y defendiendo lo indefendible”.
La intendenta aseguró que “si esta idea persiste, no solo es el cierre de la oficina de Cervantes, sino que comenzaran a correr los despidos masivos y los retiros voluntarios en toda la provincia”.
Esa teoría fue avalada por el secretario general de los empleados de correo en Neuquén y Río Negro, Rafael Tropa, quien detalló que unos 800 empleados del Correo Argentino de todo el país ya recibieron el telegrama de despido.
En otros casos, como en Chichinales, la sugerencia recibida por los encargados locales fue la del retiro voluntario.
“Nos preocupa la situación laboral del empleado, pero además para nuestro pueblo es muy importante y necesario contar con este servicio, ya que no solo en la oficina se distribuyen cartas, sino que allí cobran nuestros jubilados a razón de cerca de 30 personas por día, o quienes reciben pensiones contributivas, se distribuyen las boletas de servicios, y todos los trámites de esa institución, por lo que su cierre significaría que nos tengamos que trasladar a Villa Regina”, describió el intendente, Lucas González.
El jefe comunal resaltó que en el caso de Chichinales, el supuesto ahorro pretendido es insignificante, porque “lo que paga el gobierno nacional es el sueldo del único empleado de la oficina, ya que funciona en un edificio de propiedad del municipio que se ha cedido para el funcionamiento de la oficina postal”.
La postura de Juntos Somos Río Negro
Luego de las expresiones de los intendentes y de los representantes gremiales, esta tarde se manifestó el presidente del bloque de legisladores de Juntos Somos Río Negro, Facundo López.
El dirigente rechazó la medida “fundamentada solamente en la idea del achique sin tener en cuenta la importancia de las instituciones y la afectación a los vecinos”, al tiempo que adelantó que el Gobierno Provincial realizará gestiones para tratar de revertir esta situación.
«No hay mayor justificación del Gobierno Nacional que el simple ajuste y achique del Estado, pero que una vez más lo realiza sin entender la importancia que este tipo de instituciones tiene en las comunidades”, indicó el titular del bloque oficialista.
Por otra parte, López se solidarizó con los empleados de la empresa, “muchos de los cuales quedarán sin empleo luego de gran cantidad de años al servicio del correo, siendo prácticamente obligados a acogerse a un plan de retiro voluntario”.
Agregó que “con medidas como éstas se siguen achicando los derechos de los ciudadanos. Se están olvidando por completo del rol social que cumple el Correo Argentino, y también de su historia como institución que ha sido fundamental para el desarrollo y la soberanía.
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