Por qué hay casos de adopción que la justicia hace públicos

El Juzgado de Familia 9 de Bariloche hizo una convocatoria abierta excepcional vinculada a quienes estén interesados en adoptar a dos hermanas de 13 y 16 años.

La hermana más grande presenta un retraso madurativo moderado, un trastorno del lenguaje y una cardiopatía congénita que requiere controles anuales en el hospital Garrahan. Concurre a la escuela especial 6. La más pequeña asiste a la escuela secundaria y en contraturno, asiste a gimnasia deportiva y a una escuela de danza. Pidió ser adoptada junto a su hermana.

“Este tipo de convocatoria pública es la única herramienta que tiene el juzgado para convocar a personas dispuestas a adoptar en algunos casos”, explicó Silvana Mucci, responsable provincial de los Registros de Adoptantes, quien recalcó que entre 2018 y 2019, hubo 6 convocatorias abiertas en la provincia (tres de Viedma, dos en Luis Beltrán y esta última en Bariloche).

El procedimiento para quienes desean adoptar establece que deben inscribirse en el Registro Único de Aspirantes a Guarda con fines adoptivos. Actualmente, hay 177 inscriptos en Río Negro.

“La inscripción sirve para todo el país. El trámite es sencillo y en Río Negro no dura más de un año entre que se presenta la documentación, se participa de una charla y talleres. Si con el diagnóstico psicosocial se los considera aptos, quedan inscriptos y pueden ser llamados en cualquier momento”, puntualizó Mucci.

La situación difiere cuando hay chicos que ingresan en el sistema integral de protección de niños y adolescentes y deben permanecer en los Centros de Atención Integral de Niñez y Adolescencia (Caina) ya sea por algún problema de adicciones de sus padres o una situación judicializada.

“No todos esos chicos están en estado de adoptabilidad porque muchos tienen parientes o algún referente afectivo que los visita, los retira. Cuando fracasa toda posibilidad de que su familia de origen o referentes afectivos lo puedan cuidar, se institucionaliza”, señaló Mucci y agregó: “Ya para llegar a esa instancia es que no han tenido una vida fácil. Encima hay pocos postulantes inscriptos que busquen chicos grandes o con hermanos”.

En primer lugar, continuó, se revisa el registro de inscriptos en la ciudad para evaluar si algún postulante se adecua al perfil de ese niño o adolescente. Si lo hubiera, se hace un proceso de vinculación inmediato con el niño.

Si en el registro de Bariloche no aparece nadie, se indaga en la provincia, luego en la región y finalmente, en todas las provincias del país.

“Lo que se hace es revisar el perfil del postulante porque a veces, manifiesta su interés en adoptar chicos de hasta tantos años, con o sin hermanos. Una vez que se hizo el recorrido y no apareció nadie, se pasa a la convocatoria pública”, explicó Mucci.

Indicó que en estos casos, “lo esperable es que el proceso dure lo menos posible; por eso, a medida que se inscribe alguien, se hace el proceso de diagnóstico. Se evalúa si cuentan con herramientas para asumir el cuidado y se inicia la vinculación”.

El problema surge cuando no aparece nadie en condiciones de adoptarlos. “Los bebés resuelven rápidamente su situación porque el 90% de los inscriptos quieren bebés. El tema es la edad, cuando hay hermanos o son niños con alguna enfermedad. Siempre se hace el mayor esfuerzo para llegar lo antes posible a una familia”, enfatizó Mucci.

El contacto para adoptar

Desde el Poder Judicial, convocaron a quienes decidan asumir el compromiso de ofrecerles una familia a las dos hermanas. Deben dirigirse al Registro Único de Aspirantes a Guarda con Fines Adoptivos en la calle Juramento 190, en el cuarto piso. O comunicarse al teléfono (0294) 15480-1799, de 7.30 a 13.30 o por correo electrónico a ruagfa3@jusrionegro.gov.ar.