Venció el plazo y la cartelería de campaña sigue en las calles en Bariloche

A poco más de dos meses de las elecciones municipales, los partidos políticos incumplen con la exigencia de retirar la cartelería proselitista de la vía pública y hoy todavía se pueden encontrar gigantografías o carteles con el nombre de algún candidato que compitió el 1 de septiembre.

El Código Electoral Municipal fija un plazo de 30 días pasado el comicio para retirar la cartelería y reparar los daños que se produjeran como consecuencia de la campaña electoral.

El artículo 50 obliga a la reparación por parte de los partidos políticos responsables de todo daño que se produjere en los bienes de dominio público o privado, con motivo de la campaña electoral. La norma no especifica qué considera daño pero desde la Junta Electoral Municipal advirtieron a las fuerzas políticas, tras las elecciones del 1 de septiembre, acerca de la exigencia de retirar también carteles.

Después de la advertencia que tenían plazo hasta el 1 de octubre para retirar la cartelería, la Junta Electoral no se ocupó de verificar y tampoco hubo denuncias respecto de incumplimientos. De todos modos desde el organismo electoral indicaron que la facultad de multar y sancionar corresponde al área de Inspección General del municipio.

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En las calles del ejido urbano aun se pueden detectar carteles en postes del alumbrado público, afiches y también gigantografías que aluden a la campaña electoral.

A nivel nacional, en algunas ciudades, años atrás se comenzó a instaurar una faja sobre la cartelería proselitista fuera de plazo con la consigna “publicidad en infracción” y la firma de la Justicia Electoral Nacional.

Los clásicos y los nuevos

La campaña electoral 2019 estuvo signada por las redes sociales. Los partidos políticos apuntaron todas sus estrategias -y fondos- a este segmento para llegar a un público masivo a través de Facebook, Twitter, Youtube e Instagram, pero ninguno quiso dejar a un lado las tradiciones de la gráfica en vía pública aunque con distintas variantes.

Este año la mayoría de las fuerzas optaron por cartelería pequeña que se sujetaba con un alambre o varilla plástica de los postes del alumbrado público. Este sistema lo comenzó a utilizar en 2007 una fuerza vecinalista y luego se propagó la idea y en la última contienda electoral fue el método de publicidad callejera más utilizado.

También hubo partidos que apelaron al tradicional afiche con los rostros de las figuras políticas colocados en paredones y espacios destinado a ese tipo de cartelería.

Otros candidatos optaron por gigantografías con imágenes de sus dirigentes. Un cartel de este tipo todavía luce a la vera de la avenida Luis Piedrabuena, arriba del techo de una propiedad privada.

También en la campaña electoral hubo partidos que realizaron una meticulosa promoción con secuencias de cartelería ubicada en el reverso de los carteles viales a lo largo de avenidas muy transitadas. Mientras que otra opción apeló banderas o pancartas de nylon.