Allen: incertidumbre por las casas para madres solteras

En Guerrico, la zona rural de Allen, hay bronca e incertidumbre por las casas que construía la cooperativa de trabajo que fue denunciada como “apropiada” de manera ilegal, a través de una presunta maniobra de falsificación de firmas y actas. Tomás Almuna, uno de los albañiles que las construía, se marchó el viernes de la obra sin saber si le pagarán las tres quincenas que le adeudan por el trabajo que hizo él, su esposa y dos ayudantes para levantar las paredes de una de las ocho casas sociales que financia la provincia a través del programa “Casa Propia”.

El albañil dio algunos detalles sobre el funcionamiento de la cooperativa y contó que una persona (que no aparece en las actas de la entidad) fue quien contrató sus servicios para construir una de las viviendas, por un monto total de 90.000 pesos en concepto de la mano de obra. “Cuando me pagaban me daban un recibito como los que se compran en la librería”, explicó.

Para las casas la provincia destinó un monto 1.006.950 pesos. La cooperativa Jóvenes Allenses accedió a la construcción mediante una contratación directa que realizó el municipio en abril de este año.

Rosana Salinas, presidenta de la comisión vecinal de Guerrico, se mostró preocupada por la situación de las madres solteras que esperan por las casas.

“Norma Cáceres, que es la presidenta de la cooperativa, nos dice que hay una traba porque no se certificaron bien las cosas”.

Tomás Almuna, uno de los albañiles que dejó la obra.