Nadie vela por los bosques de Villa La Angostura

Un promedio de 60 trámites forestales y otros 15 expedientes de obras de mayor escala se tramitaban mensualmente en la oficina local de la Dirección de Bosque Nativo Provincial. Pero de siete personas que tenía el área hace un año y medio, hoy sólo quedan tres, no hay responsable profesional a cargo y la oficina está acéfala.

Los tres empleados que quedan se ocupan de trabajos como la marcación, fiscalización y cubicación de los apeos menores. Pero la evaluación de proyectos de mayor escala y cambios de usos del suelo, recaen en la oficina de San Martín de los Andes.

Villa La Angostura es una localidad donde por año se talan legalmente un promedio de 6 hectáreas de bosque, por lo que resulta clave contar con una estructura adecuada para la evaluación y fiscalización de la actividad forestal.

A fines de agosto el último profesional que se encontraba al frente de la delegación pidió traslado a otra área. El anterior jefe, está a cargo de proyectos provinciales en la zona pero no de la cuestión local. Al “éxodo” de profesionales, se sumó la jubilación de dos administrativos.

Tampoco Villa La Angostura cuenta con un Consejo Consultivo de bosque nativo –una estructura prevista en la Ley Provincial de Bosques N°2780– que alguna vez funcionó.

Actualmente se están ejecutando tres megaproyectos con importante impacto ambiental: la planta de tratamiento de residuos cloacales, la ruta de Circunvalación y el polémico megaloteo social en una zona de gran vulnerabilidad ambiental. “La oficina local está acéfala en cuanto a un responsable o jefe técnico del área forestal. Se está avanzando en lograr que se designe lo antes posible”, reconoció a “Río Negro” el director de Bosque Nativo de la Provincia, Mauricio Mazzuchelli.

Las presiones políticas por acción de grupos empresarios y desarrolladores inmobiliarios son muchas. Tantas que más de una vez han generado reclamos contra los profesionales del área forestal de la provincia que defendían la aplicación de la normativa vigente.

Coincidencia o no, los dos últimos profesionales que estuvieron a cargo, justamente han emitido informes críticos respecto de polémicos megaproyectos con “venia” política.

En agosto pidió el traslado el último responsable de la oficina encargada de controlar todos los desarrollos de obras e inmobiliarios.