Al Qaeda declara «la guerra» contra las elecciones

El líder insurgente jordano Abu Musab al Zarqawi convocó a desarrollar una «guerra feroz» contra las elecciones del 30 de enero en Irak, según una mensaje de audio colocado en Internet por la organización Ansar al Islam. «Declaro una guerra feroz contra ese maligno sistema de gobierno y contra aquellos que pertenecen a esa secta perdida», dice la voz atribuida a Al Zarqawi en alusión a la democracia, prodigada por Estados Unidos y el gobierno interino iraquí, y a los shiítas, que constituyen la mayoría de la población de Irak.

En el mensaje afirma que los comicios son una «trampa maligna» para permitir que los «shiítas asuman el poder» en Irak. También señala que se ha permitido a cuatro millones de iraníes votar en Irak para facilitar la victoria shiíta y convocó a los sunnitas, que son una cuarta parte de la población, a boicotear abiertamente los comicios.

La declaración de guerra de Al Zarqawi no sólo está dirigida contra los shiítas, también indica que su blanco son «todos aquellos que están colaborando para establecer ese sistema (la democracia) y sus familias».

Además, la organización de Al Zarqawi se atribuyó hoy la muerte de Salem Jaafar al Kanani, miembro del partido del primer ministro del gobierno interino iraquí Iyad Allawi.

«Vuestros hermanos de la Organización Al Qaeda en el País de Mesopotamia han podido asesinar a Salem Jaafar al Kanani, secretario del traidor Iyad Allawi», sostiene un texto instalado en Internet.

 

Quién es este insurgente

 

Al Zarqawi es el dirigente de la resistencia más buscado por las autoridades iraquíes y las fuerzas militares de ocupación que le pusieron un precio de 25 millones de dólares a su cabeza. Dirige la Organización de Al Qaeda para la Guerra Santa en Mesopotamia, uno de los grupos armados más activos que mató a a decenas de personas en e marco de la resistencia.

A una semana de las elecciones, la ola de violencia promete complicarlas seriamente bloqueando incluso su realización en la zona de mayoría sunnita. En tanto, el primer ministro del gobierno interino iraquí, Iyad Allawi, rechazó por «prematura» la retirada de las tropas británicas y estadounidenses de su país. «Es prematuro hablar de una retirada. No queremos un calendario. Nos gustaría que las tropas multinacionales nos ayuden en la capacitación y la construcción tanto de nuestro ejército como de las otras fuerzas de seguridad», dijo Allawi en una entrevista de la cadena británica BBC.

El primer ministro insistió en que antes de hablar de una evacuación de los militares extranjeros es necesario dotar a su país de una fuerza capaz de asegurar el control de la situación.

Para Allawi, las fuerzas armadas de su país deberían tener unos 150.000 miembros bien entrenados y con el equipo necesario y ahora disponen de unos 65.000 efectivos.

Por otra parte, el Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil confirmó el secuestro en Irak del ingeniero brasileño Joao José Vasconcelos.

Un comunicado de la cancillería brasileña (Itamarati), emitido anoche, dice que, «como es natural en situaciones de ese tipo, eventuales iniciativas serán adoptadas con la necesaria discreción» y destaca que el presidente Luiz Inácio Lula da Silva, está informado al instante de las novedades del caso.

El canciller brasileño, Celso Amorim, encomendó la conducción de las acciones diplomáticas al embajador de su país en Ammán, Jordania, Antonio Carlos Coelho da Rocha, puesto que Brasil carece de representación diplomática en Irak.

Según Itamarati, el grupo secuestrador, que serían las Brigadas de los Mujaidines, no presentó demanda alguna para liberar a Vasconcelos, un ingeniero que trabajaba para la empresa brasileña de construcciones Odebrecht en Irak.

(AFP y DPA)

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