Bariloche sumará camas de terapia intensiva

El Gobierno entregó respiradores a la fundación Intecnus, que ampliará servicios para recibir pacientes con distintas patologías, incluida covid-19 a requerimiento de Salud Pública.

La exigida situación sanitaria de la provincia y la perspectiva de apertura del turismo motivó a las autoridades a poner la mirada en Bariloche y agilizar la incorporación de recursos para atender la demanda de pacientes con covid-19 y otras patologías que requieren una atención especial.

Al hospital modular que instalará el gobierno en la zona oeste, se sumó el anuncio de la creación de una unidad de terapia intensiva y sala de internación en la fundación Intecnus, una institución que fue creada por la Comisión Nacional de Energía Atómica con recursos estatales.

Intecnus se dedica a la atención de pacientes oncológicos con tratamiento por radioterapia, quimioterapia y braquiterapia, y cuenta con un área desarrollada de medicina nuclear, pero en el último tiempo amplió sus servicios al sumar especialidades de otras patologías y un quirófano híbrido para cirugías ambulatorias.

En este complejo se proyecta la creación de un área de internación que estará situada en la planta baja del edificio. Ya está lista una sala general con seis camas (con respiradores) y hacia fin de año se prevé habilitar la terapia intensiva con 4 camas y una más de aislamiento, que contarán con respiradores y todo el equipamiento de monitoreo necesario.

“En la pre pandemia, a fines del año pasado, teníamos la intención de avanzar con la sala de internación y terapia intensiva, pero la pandemia fue la impulsora de avanzar más rápido”, dijo a RÍO NEGRO el coordinador médico de Intecnus, Alejandro Menant.

El médico cirujano precisó que en este sector estará disponible para pacientes con covid-19 de ser solicitado por las autoridades de Salud Pública, ante la situación epidemiológica de la ciudad. “Trabajamos junto al equipo de Salud Pública y somos solidarios para responder a las necesidades”, señaló Menant, quien recordó que los pacientes del hospital pueden ser derivados a la institución, a través de un convenio vigente con el Ministerio de Salud y además de las obras sociales privadas, se reciben pacientes de Ipross y Pami.

La gobernadora Carreras entregó dos respiradores a Intecnus. Foto: Alfredo Leiva

Hoy Bariloche tiene 9 camas de terapia intensiva en el hospital Ramón Carrillo con posibilidad de habilitar otras 25 con respiradores. Además en el sistema privado hay 6 camas en el Sanatorio San Carlos (todas con respirador) y 6 camas especiales covid en el Hospital Privado Regional que cuenta con capacidad de ampliarlo hasta 22 con otras áreas.

Menant dijo que en el inicio de la pandemia Intecnus ofreció sus instalaciones para habilitar internación con respiradores ante la capacidad rápida de respuesta que la estructura tenía. Sin embargo, el hospital público agilizó la ampliación de su servicio y no fue necesario apurar este sector que, por otro lado, se encontró con las dificultades habituales del sistema de salud para la adquisición de respiradores.

Esta semana la gobernadora Arabela Carreras entregó a esta institución dos respiradores para la futura sala de terapia intensiva, que fueron recibidos con expectativa mientras continúan las gestiones para la compra de más respiradores. En materia administrativa, el servicio de internación ya tiene la prefactibilidad y resta ahora la fiscalización previa a la habilitación que deberá otorgar el Ministerio de Salud de Río Negro.

Menant estimó que en corto plazo se podría habilitar la internación de cuidados intermedios y hacia fin de año o principios de 2021 llegaría el turno de la terapia intensiva. Con este nuevo servicio, Intecnus sería el único centro de salud de la región complejidad 7.


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