Blumberg pidió disculpas: «No soy ingeniero»

El referente en seguridad dijo que el escándalo por el uso de un título que nunca tuvo no pondrá fin a su carrera política, que marcha de la mano de Macri. Filmus salió a criticarlo.

El empresario textil Juan Carlos Blumberg negó ayer que el escándalo por su fallido título de ingeniero vaya a poner fin a su carrera política, volvió a pedir disculpas a la sociedad por el «error» y aseguró que es un «referente social» que va a «seguir luchando».

Además, se quejó de que el tema haya sido difundido en medio de la campaña electoral porteña, donde su aliado Mauricio Macri disputa la jefatura de Gobierno con el kirchnerista Daniel Filmus, y agregó que «nos tienen acostumbrados a muchas cosas, que se ataque como se ataca a Mauricio».

«Es muy triste ver eso en lugar de debatir y sacar adelante ideas y propuestas», lamentó, mientras enfatizó que «yo no me he iniciado todavía en la política, no soy político, soy un referente social que voy a seguir luchando, no le quepa ninguna duda».

En declaraciones a Radio 10, Blumberg volvió a pedir disculpas «a la ciudadanía» por haberse instalado públicamente con un título profesional que en realidad no tenía y destacó que «la gente me pide en la calle que siga luchando, y lo voy a hacer».

Con la voz quebrada, aseguró que «mi lucha es lo que yo he tomado ante la tumba de Axel de luchar para que otras personas no lo pasen lo que a él le pasó, preferiría no estar en este lugar, preferiría estar con Axel en casa, hoy festejando el Día del Padre y no tener que ir ahora al cementerio a ver la tumba de mi hijo».

Asimismo, en sendos reportajes publicados por los diarios Clarín y La Nación, justificó que en la fábrica lo llamaban siempre «ingeniero», «y uno se acostumbró».

«Yo no soy ingeniero. Le pido disculpas a la gente. Es un error mío, sólo mío, no haberlo aclarado antes», manifestó.

De este modo, le puso fin a las versiones que circularon en los últimos días sobre que no era ingeniero textil, como se identifica desde que se hizo conocido por el crimen de su hijo Axel, en abril de 2004, luego de un secuestro. Blumberg aclaró que «jamás quise ponerme un título honorífico» y que no quiso «engañar» a la sociedad.

«O sea, toda la vida he estado en temas de ingeniería, qué sé yo…, desde los 22 años. Como director de fábrica siempre me decían ''ingeniero, ingeniero'' y uno se acostumbró a que le digan así», comentó.

Sostuvo que nunca firmó un papel público como ingeniero, pese a que «he comandado muchas cosas y he tenido grandes responsabilidades como director de fábrica». «Yo estudié en Alemania y en otros lugares, pero no tengo el título de ingeniero. He hecho muchas fábricas en Perú, en Colombia, en Brasil y en Argentina», apuntó. Enfatizó que «mi intención no fue arrogarme ningún título». (DyN)


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