Marcharon contra la violencia machista y por Rafael Nahuel
En Bariloche la movilización tuvo el doble propósito. Hubo pintadas y cruces en la sede de Prefectura.
La comunidad mapuche de Bariloche se hizo oír en el acto.
La marcha para repudiar los femicidios y todo acto de violencia contra las mujeres convocó este lunes a cientos de manifestantes en Bariloche y se realizó en forma superpuesta con la movilización que reclamó “verdad y justicia” por el crimen de Rafael Nahuel.
La mayoría de las agrupaciones participantes levantaron ambas consignas, aunque en primer plano quedó la reivindicación de la lucha del joven mapuche, quien murió hace dos años en Villa Mascardi al ser baleado por efectivos del grupo Albatros de la Prefectura Naval.
La concentración había sido convocada en la esquina de Moreno y Onelli, pero antes de comenzar un grupo numeroso se dirigió a la sede local de Prefectura, ubicada a un par de cuadras y allí realizó pintadas y arrojó piedras contra el edificio, que sufrió la rotura de algunos vidrios.
Un grupo de prefectos salió a la galería de ingreso y armó una barrera con escudos y cascos. Hubo insultos y gritos, pero el incidente pasó a mayores.
De la columna participaron unas quinientas personas que bajaron por Moreno hasta la esquina de Quaglia y de allí al Centro Cívico. Además de organizaciones mapuche y de parientes de Rafael Nahuel participaron partidos de izquierda, representantes de la UNRN, La Cámpora, Mala Junta, la CTA, la APDH y la murga Herederos de Kazó.
“Vecino, vecina, no sea indiferente, nos matan a las pibas en la cara de la gente”, fue uno de los cantos más repetidos en la marcha. También resonó el emblemático “ni una menos, vivas nos queremos”.
Los manifestantes se sumaron además a los repudios a la Prefectura (acusada del crimen de Nahuel) y pidieron “juicio y castigo a los resposnables materiales y políticos” de su asesinato.
En el Centro Cívico colocoraron un gran cartel con la cara de Nahuel y la leyenda “ni un muerto más por defender el territorio”.
Hubo una performance artística para concientizar sobre la violencia aplicada al pueblo mapuche y la madre de Rafael, Graciela Salvo, habló desde un pequeño escenario para transmitir su dolor “de todos los días” ppor la ausencia de su hijo. “Atropellaron a la comunidad y perdimos a Rafael, no tenían derecho -acusó-. Yo pido justicia por Rafita y que el asesino esté tras las rejas”.
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