Crisis de identidad

¿Cómo tomará José Pekerman el paso dado por la selección en Quito? Sin duda que la derrota ante Ecuador se trata de una advertencia, porque de alguna manera traicionó sus convicciones al apostar por el resultado y es peligroso, de cara al Mundial, que su equipo no haya mostrado todavía una identidad clara de juego. Seguramente es más difícil intentar que un equipo juegue bien al fútbol, a apostar a salir a destruir, a patear la pelota para arriba y eso Pekerman lo tiene claro. Pero la experiencia realizada en la fecha anterior de la eliminatoria dio sus frutos a nivel resultado: el entrenador argentino formó dos equipos y obtuvo dos victorias, a costo de no variar mucho de esquemas y nombres, provocando que no haya una identidad, un patrón de juego. Ahora intentó hacer lo mismo y se llevó, por ahora una derrota. No es para dramatizar un mal resultado, sino que el equipo no muestre un patrón de juego, que no se sepa que es lo que quiere dentro del campo y que comience con un sistema táctico y termine con uno totalmente diferente.

¿Cambiar o improvisar?

Pero la derrota no es lo grave. Hay cuestiones más graves que el triunfo de los ecuatorianos. ¿A qué juega Argentina? ¿Con tres defensores o con cuatro? ¿Con volantes para crear o destruir? ¿Con un delantero o con dos? Bueno, a veces juega con tres atrás, otras con cuatro. A veces sale a atacar y otras espera. Es decir, no tiene una identidad todavía. Ante Ecuador, Pekerman modificó tres veces el orden táctico del equipo y nunca pudo encontrarle la vuelta al juego. De arranque jugó con tres en el fondo (Coloccini-Milito-Samuel), doble cinco (Cambiasso-Duscher, Zanetti y el ‘Kily’ por las bandas, Aimar y Maxi Rodríguez, delante de los volantes centrales y Galletti como única punta definida. A los 30 del primer tiempo Pekerman sacó a Duscher por Tevez y el plan fue otro: cuatro defensores (con Zanetti por izquierda), un volante central (Cambiasso), un enganche (Aimar) y dos delanteros (Tevez y Galletti. Pekerman volvió a modificar el esquema cuando ya perdía el partido. Volvió a tres defensores (ahora con Zanetti por derecha, más Coloccini y Samuel), D’Alessandro por AImar en la creación) y un delantero más, Figueroa, que reemplazó a Milito. Tres dibujos y ningún resultado positivo. El fútbol nunca apareció. Esta incertidumbre táctica a dos días del partido con Brasil no es una buena noticia. (Télam/AR)

“Brasil es superior”

“Brasil siempre fue superior a Argentina y si alguien lo duda, solamente debe fijarse en las estadísticas”. Ningún brasileño es el autor de semejante declaración. Aquella frase fue dicha por Julio Grondona, presidente de AFA, nada menos que dos días antes del más grande clásico entre selecciones. En declaraciones al programa de Canal 7, “Polémica en los estadio”, Grondona amplió aquellos dichos sin despejar el doble sentido: “A mí no me provoca ninguna satisfacción especial ganarle a un superior, por lo que considero que el partido del miércoles con los brasileños es uno más en estas eliminatorias, en las que por suerte Argentina marcha tranquilo”, sostuvo el titular afista. “Muchos dicen que jugar bien es esto o aquello. A mí me gustaba como jugaban Diego Maradona, Ricardo Bochini y Roberto Perfumo. Pero lo que más le gusta al hincha es ganar, porque cuando eso sucede, todos se van contentos”, apuntó. ¿Cómo deberán leerse estas palabras? Como de quien vienen. De Julio Humberto Grondona. (Télam/AR)

EL DATO 12 Los puntos que quedan en juego. Si Argentina le gana a Brasil y Paraguay no hace lo propio, el equipo de Pekerman logrará la clasificación este miércoles.