El 30% de los alumnos de las escuelas privadas es pobre

El dato surge de un informe realizado por la Universidad Católica Argentina (UCA) a nivel nacional. El relavamiento incluye el conglomerado Cipolletti-Neuquén-Plottier. La incidencia de la pobreza es similar en todos los niveles (inicial, primario y medio), y es mayor en las escuelas religiosas.

Con el ciclo lectivo 2024 ya iniciado en la mayoría de las jurisdicciones provinciales del país, y mientras la aceleración de precios de la canasta escolar acecha el bolsillo medio de las familias, un fenómeno desconocido emerge dando cuenta de lo severo de la crisis: la pobreza ya alcanza a un tercio de la matrícula de alumnos de las escuelas privadas.

El dato surge de una extensa investigación titulada «Caracterización de la población de niños/as y adolescentes escolarizados según el tipo de gestión educativa» publicada por la Universidad Católica Argentina (UCA).

El estudio a cargo de los investigadores Ianina Tuñón y Matías Maljar tiene alcance nacional, se enfoca en centros urbanos de más de 80.000 habitantes y en el relevamiento de 4.325 casos incluye al conglomerado Cipolletti-Neuquén-Plottier.

«En el marco de la proximidad del inicio del ciclo escolar 2024 y una coyuntura socioeconómica muy compleja para la sociedad argentina como consecuencia de los elevados niveles de inflación y la desregulación de los mercados, cabe preguntarse sobre la población de niños/as y adolescentes (NNyA) que en situación de vulnerabilidad social asisten a escuelas de gestión privada laica o religiosa cuya escolarización supone una contribución económica por parte de los hogares», expresa el documento de la UCA al inicio de la presentación.

El 80,7% del total de la matrícula educativa en los niveles inicial, primario y medio, asiste a la escuela pública. El 12,6% accede a colegios privados laicos, y solo el 6,8% asiste a escuelas privadas confesionales o religiosas.

La investigación toma como base los datos sobre pobreza e indigencia incluidos en la a Encuesta de la Deuda Social Argentina (EDSA) que publica periódicamente la UCA. El último dato disponible arroja que hacia fines de 2023, el 62,9% de las personas de entre 0 y 17 años de edad, son pobres en Argentina.

La lógica histórica del servicio educativo indica que los sectores de mayores ingresos envían sus hijos e hijas a los colegios privados, sean laicos o religiosos, mientras que el resto de la matrícula, que en configura la mayor porción de la matrícula, asiste a la escuela pública.

Al respecto el estudio de la UCA indica que ocho de cada diez alumnos (80,7%) sigue asistiendo a la escuela pública mientras que solo el 19,3% del alumnado total accede a la escuela privada, donde un 12,6% corresponde a colegios privados laicos y un 6,8% a colegios privados religiosos.

El dato que sale de lo común y llama la atención, es que la vulnerabilidad sobre la niñez ya no solo es propia de los alumnos que asisten a la escuela pública. La investigación de la UCA revela que el 26,8% de los alumnos y alumnas de las escuelas privadas laicas son pobres, y que el ratio se eleva al 33,9% en las escuelas privadas religiosas.

Uno de los interrogantes en un marco de marcada aceleración de precios y de salarios reales cayendo, era si habría una migración significativa desde el sistema educativo público al privado, dados los aumentos en las cuotas. Los organismos oficiales tanto a nivel nacional como provincial indican que no ha habido cambios significativos en la matrícula de las escuelas privadas.

No obstante, en los colegios de la región sí se verifica una migración desde los colegios que son totalmente privados y tienen los aranceles más altos, a los colegios públicos de gestión privada, que en el caso de Río Negro, tienen el monto máximo del arancel regulado por la provincia.


La polémica con el voucher educativo


Es manifiesta la dificultad que miles de familias atraviesan en el inicio del ciclo lectivo para afrontar los aumentos en las cuotas de los colegios privados. El gobierno de Javier Milei había propuesto el voucher educativo en campaña, y en el mes de febrero el presidente había prometido «ayuda para que las familias puedan pagar la cuota».

El tema reapareció esta semana en una entrevista que el mandatario ofreció al periodista Samuel «Chiche» Gelblung, donde el presidente afirmó: «Hicimos un programa para darle financiamiento a los chicos que estudian en el sector privado y que los padres no pueden pagar la cuota».

El periodista re preguntó: «Pero eso nunca llegó…». El presidente insistió: «Si, está todo funcionando». Gelblung volvió a indagar: «¿Ya le avisaron a los padres que si vos no podes pagar la cuota te ayudan?». El presidente volvió a afirmar: «Sí, lo tienen que coordinar con el colegio, y la ayuda se hace desde Anses».

Lo que sorprende es que no existe anuncio oficial alguno que dé cuenta de un programa semejante, ni existe lugar físico o virtual donde solicitar la asistencia financiera de Anses a la que Milei hizo referencia.
La repercusión fue tal, que desde el ministerio de Capital Humano que conduce Sandra Petovello, se vieron obligados a aclarar que el programa que citó Milei aún no está implementado.

En este sentido, la única política que implementó el gobierno nacional en lo que va de 2024 para contener el avance de los precios de la canasta escolar al inicio del ciclo lectivo, fue el aumento del monto de la Ayuda Escolar Anual, llevándola hasta los $70.000 por alumno o alumna en edad escolar.


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