El corso de Zapala convocó a miles de personas
Una vez más, las murgas y comparsas del centro neuquino mostraron todo su brillo. Alrededor de 18.000 asistieron al espectáculo.
Las estimaciones son variadas. Algunos hablan de 18.000 personas, otros de un poco menos. Lo cierto es que, números más o menos, el corso de Zapala ratificó su poder de convocatoria.
La fiesta popular de los zapalinos volvió a desbordar los pronósticos más alentadores y demostró que su magia sigue intacta a pesar del tiempo. Los elencos locales le aportaron un brillo inusitado.
En cada pasada, las murgas y comparsas mostraron el sello local y dejaron en claro que todo el trabajo realizados en los últimos meses rindió sus frutos.
El tributo al público, con un ida y vuelta que incluyó ovaciones y reconocimientos fueron el sello de para cada grupo que representó a los diferentes barrios de la ciudad. El predio del ferrocarril se cubrió de público desde temprano en la jornada inaugural.
El calor de la jornada, por momentos agobiante, hizo que la gente se volcara masivamente para disfrutar de un evento que prometía mucho. El cierre de la primera jornada estuvo a cargo de Los Cafres.
La mítica banda de reggae hizo delirar a la multitud, en una presentación que se extendió hasta más allá de las 2am del domingo. Sin dudas, una fiesta para toda la familia.
Para este domingo, en tanto, se anunciaba el cierre a cargo de Los Auténticos Decandentes, otra garantía a la hora de hacer disfrutar a la gente con su repertorio de temas que suenan en todas las canchas y en cada festejo popular.
La gente de Zapala estuvo presente, como es habitual. Pero también hubo presencia de vecinos que llegaron de localidades cercanas y no tanto atraídos por el imán que representa el corso.
Las redes sociales se llenaron con fotos, videos y muestras de satisfacción por lo que fue un verdadero éxito. Desde la organización se destacó el trabajo de los elencos locales y el público agradeció la calidad de la propuesta cultural.
El sábado, la actividad arrancó alrededor de las 22 y se extendió hasta la madrugada. Sin dudas, la inauguración del Paseo de la Estación fue un acierto que permitió que el público disfrutara a pleno.
Los servicios gastronómicos trabajaron desde temprano y hasta la madrugada con largas colas y espera para acceder al clásico choripan y la gaseosa. La fiesta, que cerraba este domingo por la noche, ratificó su poder de convocatoria.
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