El ex obispo Piña, feliz por las consecuencias de su acción

El obispo emérito Joaquín Piña destacó ayer la contribución de Misiones «con otras provincias en situación similar», en alusión a la derrota electoral de la reelección indefinida del gobernador Carlos Rovira y sus consecuencias en Buenos Aires y Jujuy.

«Enhorabuena», respondió al prelado ante una consulta periodística sobre las consecuencias del «efecto Misiones» en la desactivación de los planes reeleccionistas de Eduardo Fellner, en Jujuy, y Felipe Solá, en Buenos Aires.

Piña encabezó ayer una reunión preparatoria con los 20 convencionales constituyentes del Frente Unidos por la Dignidad (FUD) fueron electos el pasado 29 de octubre, en el salón parroquial de la iglesia Inmaculada Concepción, ubicada en el barrio Villa Urquiza, de Posadas.

Piña dijo que «a lo largo de la campaña» tomó conciencia de las repercusiones nacionales de la elección en Misiones, ya que al principio «no lo había previsto».

Sin embargo, reiteró que el presidente Néstor Kirchner fue quien «nacionalizó» el conflicto de Misiones. «Pero bueno, si en algo podemos contribuir a otras provincias que se encuentren en una situación similar, enhorabuena», subrayó. Acompañado por los convencionales electos, Piña reiteró sus propósitos de mantenerse prescindente de la actividad política porque dijo que su «misión no es esa». Remarcó que los convencionales del FUD cumplirán con el compromiso de no modificar el artículo de la Constitución provincial que permite la reelección indefinida. «Nos comprometimos a eso y debemos cumplir».