El FdT se posiciona en su pedido de espacios para las mujeres en el Superior Tribunal de Justicia

Esa oposición lo reclama frente a la designación de dos vocales, en reemplazo de Zaratiegui y Mansilla.

La inscripción de candidaturas vencerá el 28 de junio y la elección de los vocales del STJ será el 30 de junio, pero el Frente de Todos reafirmó su pretensión de priorizar la inclusión de las mujeres en la nueva integración.

En principio, el legislador Marcelo Mango declaró querer “votar mujeres plenamente decididas a construir una sociedad más justa también en el Superior Tribunal de Justicia”. El legislador es uno de los cuatro partícipes del FdT en el Consejo de la Magistratura Grande, que elegirá a los nuevos integrantes para cubrir las vacantes de los renunciados Adriana Zaratiegui y Enrique Mansilla. Aquella participación es minoritaria, pues el cuerpo se conforma con 24 consejeros, y la presidencia de la gobernadora Arabela Carreras.

Luego, la referente del FdT de Bariloche, Ana Mark reclamó que ambos nombramientos sean femeninos “para lograr que el STJ sea el primero STJ del país con mayoría de mujeres”.

La semana pasada, Carreras afirmó que los requisitos de la ley de género “están cumplidos con la permanencia de la jueza Liliana Piccinini”. Esta norma alude que el cuerpo se debe conformar con “vocales de ambos sexos”.

El plural, según Mango, conlleva que, por lo menos, deben ser dos vocales por cada sexo aunque su enfoque se concentra en la perspectiva de género. Aludió que “es mandante” del posicionamiento del bloque y de las mujeres mientras desestimó una candidatura del bloque pero si que se alentará a la participación.

Simultáneamente, Mark recordó “la lucha” y “la búsqueda de una justicia con perspectiva de género”, planteando que “es necesario que las dos vacantes del STJ sean cubiertas por mujeres iniciando un proceso de compensación ante las históricas desigualdades”.

Recurrió a “datos de la Corte Suprema de Justicia de la Nación” donde se consigna que “el sistema judicial” del país “tiene un alto porcentaje de masculinización en la cumbre de la pirámide donde sólo el 31% son mujeres contra el 69%”.

“El techo de cristal -agregó- aplasta a las mujeres en sus posibilidades de acceder a los cargos de máxima responsabilidad y enquista las desigualdades y exclusiones históricas”. Alude que el enunciado del “oficialismo que debe priorizarse la idoneidad por sobre el género” se “profundiza esta exclusión, negando la idoneidad de las mujeres”.

Por su parte, la semana pasada, la legisladora oficialista, Silvia Morales -una de las ocho consejeros de JSRN en el Consejo- compartió el criterio de la gobernadora, valorando las “políticas de género, de la equidad y de la igualdad” aunque priorizando “la idoneidad de los profesionales. Son cargos -agregó- donde la persona debe demostrar de manera contundente que está formada intelectualmente, con capacidad, experiencia e idoneidad. Es importante respetar el cupo y el género pero eso no es limitante para elegir al mejor candidato o al mejor postulante en cuanto a su formación para desempeñar luego el rol”.


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