El pasado mira hacia adelante
Esta calle histórica, donde aún está en pie la vieja estación de trenes inaugurada de 1899, alberga comercios, chacras y el polo industrial de la ciudad. La Vintter, en ojos de los vecinos.
La calle Vintter es uno de los accesos directos a Stefenelli desde la Ruta 22 y una de las arterias de Roca más frecuentadas.
Es extensa y tiene varios cortes. Lo vecinos resaltan el tránsito, las altas velocidades a las que los conductores circulan y lo reducida que se ve cuando se estacionan vehículos a ambos lados de la calle. Al ser un acceso principal para entrar al barrio, a veces se satura porque es “muy angosta” y el caudal de personas que la transita supera los límites.
Pavimentada por partes –aunque no toda– en diferentes años debido a su longitud, culmina arriba de la ciudad, en el Parque Industrial 1, exactamente al 2700. Tiene chacras que ya no están en producción y han sido acondicionadas para el loteo y otras que mantienen vivo lo que queda de su esencia.
Con mucha historia
La Vintter guarda mucha historia familiar en el rubro comercial. Uno de los casos más conocidos es el de Panadería La Unión, de la familia Cuppari, que lleva en el mercado tres generaciones.
José Eduardo Cuppari es hijo del fundador y fue testigo del asombroso cambio del barrio. Amasó su memoria y recordó que “avanzó muchísimo la parte edilicia, desde la construcción de comercios, hasta la de viviendas. Había chacras y tamariscos, donde ahora hay casas”.
La Estación Ferroviaria Alejandro Stefenelli, en Vintter y Rochadale, recibió ese nombre en el año 1933. Pero la Dirección de Turismo concluye en que “la estación debió ser inaugurada oficialmente el 1 de junio del año 1899, porque en esa fecha se habilitó la línea férrea que unía a Bahía Blanca con General Roca”.
Continuando aún más al norte, el asfalto se termina, la piedra y la tierra se adueñan de la zona vial, a la que la gente ya se acostumbró. Las casas no están tan cerca y las chacras toman un rol protagónico. Los vecinos riegan sus veredas y parte de la calle, porque los días de viento se vuelve una polvareda.
Hace veinte años que Carlos Morales vive sobre la Vintter. Su casa es de las pocas que tienen rejas y desde detrás de ellas aseguró: “Nosotros no teníamos tantos vecinos como ahora y eso que tampoco somos la cantidad”.
Debido a su extensión, fue asfaltada por partes, entre 1965 y 1989.
El único semáforo
8 calles
con nombres de árboles hacen esquina con la Vintter, en las primeras ocho cuadras.
Datos
- “Me llama la atención el movimiento que tenemos, la gente anda muy rápido. Pasa que quedó muy angosta la calle”.
- José Eduardo Cuppari es vecino y dueño de la Panadería La Unión.
- “Enfrente, acá no más, había un zanjón que ahora fue tapado. Antes la calle era una sola oscuridad y ahora está bien iluminada”.
- Carlos Morales vive sobre calle Vintter desde hace veinte años.
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