“El sobrepeso y la tecnología”

A pesar de que los últimos estudios indican que la obesidad está creciendo a pasos agigantados en todo el mundo, la percepción de la gordura sigue siendo negativa ante ciertos modelos culturales; pensándolo de esa manera sólo lo relacionamos con lo estético. Pero ya cuando el sobrepeso pasa a ser un inconveniente e interfiere en el desarrollo de las actividades de una persona que por ser gorda: no tiene…, no hay…, va a tener que ir a otra parte…, aparece el fantasma de la discriminación. Hace dos semanas fui a solicitar un turno para realizarme una tomografía de cráneo. Orden autorizada, turno otorgado, llegó el día en cuestión y me presenté en la Clínica Humana de Imágenes de la ciudad de General Roca, donde me recibió la secretaria con la primera pregunta: “¿Cuánto pesa?”. Y a continuación como parte de un libreto: “Porque no hay que pesar más de 113, 115 kilos, porque hoy a la mañana una señora de 105 kilos rompió los ventiladores…”, etcétera. Esta empresa publicó en un suplemento especial y en su página web, con orgullo, mostrando a la sociedad la adquisición de un aparato de última generación: un tomógrafo multicortes Lightspeed 16 de General Electric. Cuenta además en su página web: “Este novedoso tomógrafo admite pacientes corpulentos”. Alguien escribió mal el texto porque la realidad dicha por una delgada secretaria es que “este tomógrafo no “atiende” personas gordas. Estoy hablando de una empresa al servicio de la medicina cuyos dueños son médicos, que en resumidas cuentas no escapan a la regla general de que –para establecer una comparación– las empresas no fabrican talles grandes porque encarece los costos. Me pregunto si General Electric tendrá modelos de tomógrafos para personas que superen los kilos que la cultura actual considera aceptables. Nora Virginia Sánchez DNI 11.680.964 Roca