«¡Pensaste que me iba a quedar tranquila!», le dijo y lo apuñaló con la ayuda de su pareja: los imputaron por intento de homicidio en Roca
El hecho ocurrió el 24 de abril último en Roca. La víctima se encuentra en terapia intensiva, con pronóstico reservado. La fiscalía imputó a una mujer por intentar matar a su expareja. El mismo delito le atribuyó al novio de la imputada. El juez aceptó los cargos y les impuso tres meses de prisión preventiva por pedido del MPF.
La audiencia de control de detención y de formulación de cargos se hizo este sábado, en la Ciudad Judicial de Roca. (foto de archivo Juan Thomes)
Descendió de una moto y avanzó en dirección hacia un joven que estaba en un Volkswagen Bora, estacionado en la calle San Juan al 2261 de Roca. “¡Pensaste que me iba a quedar tranquila!”, gritó la mujer y sin dudarlo lo apuñaló en el cuello. El joven se cubrió la cara con sus brazos. La agresora le tiró más puntazos con una navaja que lesionaron su rostro y los brazos. El conductor de la moto se sumó a la agresión y también apuñaló a la víctima. Un amigo del herido intervino para que cesen el ataque. Los agresores se retiraron, subieron a la moto y escaparon.
Matías Torres se desplomó sobre el asfalto. Su ropa comenzó a teñirse por la sangre de las heridas. El amigo que lo auxilió, logró subirlo al auto y lo trasladó hasta el hospital de Roca, donde lo operaron de urgencia para salvarle la vida la noche del jueves último. Aunque sigue internado en terapia intensiva y su estado es reservado. Después, la Policía detuvo a los sospechosos en su domicilio.
La pareja compareció este sábado ante el juez de garantías Gustavo Quelín, para la audiencia de control de detención y de formulación de cargos.
La fiscal Norma Reyes y la fiscal adjunta Yamila Ayelen Vera imputaron a Alan John Aliste y a Edelina Antonella Escobar por intento de homicidio. Relataron que el hecho atribuido a la pareja ocurrió alrededor de las 21.30 del 24 de abril último, en la calle San Juan 2261 de Roca.
El hecho atribuido a los imputados
Contaron que Aliste conducía una moto, con Escobar de acompañante. Se detuvieron esa noche en el lugar donde es encontraba Torres, sentado en su vehículo Bora, que estaba estacionado, en compañía de un amigo.
Las fiscales dijeron que Escobar descendió de la moto con un cuchillo tipo navaja, se dirigió al Bora, “donde se encontraba su expareja Matías Torres y lo apuñala en el rostro, en el cuello y los brazos”. Afirmaron que también Aliste se acercó hasta la víctima y lo apuñaló con un cuchillo.
“De esta manera Aliste y Escobar actuando de común acuerdo intentaron dar muerte a Torres; no pudieron lograr su objetivo por causas ajenas a su voluntad toda vez que la víctima se intentó defender y fue ayudado por su amigo quien paró la agresión y lo llevó de inmediato al hospital local”, explicó la fiscalía. Calificaron de manera provisoria el hecho atribuido a los imputados como un intento de homicidio.
Reyes y Vera sostuvieron la imputación con el acta de procedimiento policial. Mencionaron las entrevistas que policías hicieron a testigos y al amigo de la víctima. Además, indicaron que Torres antes de entrar al hospital le dijo a su amigo que la agresora había sido su expareja.
Vera indicó que los policías fueron al domicilio de Escobar y observaron que estaba la moto descripta por los testigos. La fiscal dijo que los sospechosos se negaron a salir de la vivienda. Recién aceptaron cuando los intimaron con un allanamiento. Pero fueron en la moto hasta la comisaría y quedaron arrestados.
La fiscalía señaló que contaba con el informe del Gabinete de Criminalística, que trabajó en el lugar del hecho, el acta de inspección y el registro de las cámaras de seguridad del 911 que grabaron a los imputados pasar en la moto antes y después de cometer la agresión.
La fiscalía señaló que una de las puñaladas cortó una artería del brazo de la víctima y puso en riesgo su vida.
Los cuestionamientos de la defensa
El defensor particular Oscar Pineda cuestionó la calificación legal del hecho. “¿Por qué tentativa de homicidio?”, preguntó.
“Creo que es evidente que el intento de apuñalarlo en el rostro y en el cuello y que la defensa de él, al poner los brazos para que no fuera apuñalado, da cuenta que no querían solamente desfigurarle la cara”, respondió la fiscal.
“En principio, para la fiscalía, es que claro que ellos lo que intentaron es darle muerte”, sostuvo. El defensor insistió y observó que se trataba de lesiones graves.
La decisión del juez
El juez resolvió la controversia y admitió los cargos formulados por la fiscalía contra los imputados. “Entiendo que cuando recién se inicia la investigación la calificación dada es correcta”, afirmó.
Dijo que las lesiones descriptas por la fiscalía “aparecen con la entidad suficiente para causar la muerte de una persona, cuando son dirigidas a determinadas partes del cuerpo que aparecen como vitales”. Y habilitó a la fiscalía a investigar el caso.
La discusión por la prisión preventiva
Reyes pidió al juez que les imponga a los imputados la prisión preventiva por tres meses. Mencionó la posibilidad de entorpecimiento de la investigación en el caso de que recuperen la libertad.
Y recordó la conflictiva relación que transitan los imputados con la víctima. Además, aseveró que en el caso de recaer condena será de prisión efectiva.
La fiscalía dijo al juez que testigos del hecho declararon a los policías que tenían miedo por posibles represalias. Según Reyes, dijeron que Escobar es muy violenta y “acostumbra a subir escraches con mentiras a las redes” sociales.
Advirtieron que el comportamiento de ambos imputados fue de suma gravedad y de mucha violencia y se negaron a colaborar con el procedimiento policial, “salvo cuando fueron intimados con un allanamiento nocturno”.
Dijeron que era necesario imponerle a la pareja imputada tres meses de prisión preventiva para reunir los elementos, y hacer las pericias que faltan.
Pineda se opuso. Expuso ante el juez que adhiere “a la postura de Alberto Binder en el sentido que es el Estado el que tiene que preservar a la víctima o eventualmente a los testigos”. “¿Cómo le va a pasar la carga a los imputados?”, señaló.
“Encima que están perseguidos por la acción penal, tienen que cubrir una tarea que es del Estado no es del imputado”, manifestó.
Propuso que la prisión se cumpla de manera domiciliaria, con dispositivo electrónico para controlar sus movimientos. Destacó que la mujer tiene un hijo de 4 años y otra de 14 que viven con ella. Lo mismo pidió para el varón -y pareja de Escobar- imputado.
Dijo que de esa manera no podrán amedrentar a la victima o los testigos o entorpecer la investigación. Recordó el principio de inocencia. “Vamos a seguir llenando las comisaría de presos, ya no hay lugar. La pulsera es una alternativa para los dos”, aseguró Pineda.
“Entiendo lo que plantea el defensor con relación a los hijos menores de Escobar, pero son cosas que uno las tiene que pensar antes de cometer estos hechos. La fiscalía insiste con la prisión preventiva”, replicó Reyes.
“Si en este caso fuera la víctima una mujer no estaríamos discutiendo tanto si es con pulsera o sin pulsera”, alegó Vera. “No tenemos una pericia social, no nos consta que los hijos vivan con ella. Ella vive con los padres, tranquilamente lo pueden cuidar sus padres si viven todos en una misma casa”, argumentó Vera.
Tres meses detenidos
“Por lo tanto le pido señor juez que tenga en cuenta a la víctima, que sufrió heridas graves, que está luchando por su vida en este momento y que no haga lugar a la prisión domiciliaria”, alegó.
El juez le dio la razón a la fiscalía. Citó las evidencias que expuso para fundar la medida cautelar. “Es cierto que la prisión preventiva tiene como finalidad proteger el proceso, para que avance hacia una acusación y eventual condena en forma libre, sin alteraciones de los imputados”, expresó el juez.
“La fiscalía ha demostrado peligros procesales, testigos que se niegan a dar su versión del hecho, hay prueba que los imputados en libertad pueden entorpecer por el comportamiento que tuvieron de huir del lugar y no cooperar con la Policía”, destacó. Argumentó que todo eso “hacen presumir que ellos (por los acusados) en libertad van a entorpecer” la investigación.
Quelín dispuso tres meses de prisión preventiva y que sean enviados al penal 2 de Roca y que se garanticen las condiciones de detención, sobre todo, de la mujer. Y le pidió a la fiscalía completar la investigación en ese plazo.
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