La Justicia ordena retrotraer una multa errónea de Aduanas

El caso involucra a una moto de alquiler de una empresa chilena que cuestionó una multa abultada y un juez federal determinó que se trató de un mal proceder del personal aduanero.

Un error en un trámite administrativo de personal de la Dirección Aduanas en un paso fronterizo neuquino motivó una demanda judicial de una empresa chilena de alquiler de motos a la cual se le dio la razón y se le retiró la multa impuesta por el organismo nacional.

En el caso intervino el Juzgado Federal de Zapala ante la demanda de un abogado de Bariloche, Juan Ignacio Gigena, en representación de la empresa chilena Motoaventura Ltda que en 2017 fue multada por una supuesta infracción en el régimen de ingresos y egresos de una motocicleta de alquiler a la Argentina.

El Juzgado Federal revocó una resolución de la Dirección de Aduanas, por lo que se le devolverá el valor de la multa abonada, y ordenó además al organismo a pagar costas.

El juez revisó las actuaciones y comprobó que todo se originó a partir de un error propio de la Aduana, que no registró correctamente un paso del vehículo afectado desde Argentina hacia Chile.

El conflicto se originó el 20 de abril de 2016, cuando un turista regresaba a Chile por el paso Mamuil Malal (en Junín de los Andes) a bordo de la motocicleta BMW de alquiler perteneciente a Motoaventura, la cual fue secuestrada por una supuesta grave irregularidad que en realidad no había sido tal.

Se acreditó luego que la supuesta grave irregularidad, en realidad, había sido un error administrativo de la propia Dirección de Aduanas que no registró correctamente el tránsito anterior del motovehículo de alquiler hacia Chile en marzo de 2016 por el paso Cristo Redentor. En concreto, en un viaje anterior, otro turista había ingresado la motocicleta hacia Argentina y regresó a Chile con toda la documentación en regla. Pero Aduana no registró ese paso desde Argentina hacia Chile y consideró que el vehículo había superado el plazo de permanencia en el país.

El caso es llamativo porque cuando nuevamente ingresa la moto al país, en abril, Aduana no registró la supuesta irregularidad pero sí lo hizo cuando el vehículo regresaba hacia Chile nuevamente y se produjo el secuestro de la moto y la multa por más de 150.000 pesos a la empresa rentadora chilena.

La firma durante cuatro años mantuvo secuestrada e inutilizada la motocicleta de alta gama por el error administrativo de Aduana.


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