La tarjeta Alimentar hizo crecer las ventas y las consultas en Bariloche

En los súper y almacenes de los barrios más populares el plástico con crédito para comprar comida se notó con la inyección de fondos.

A solo 24 horas de la entrega de las primeras tarjetas Alimentar en Bariloche, los comerciantes se vieron sorprendidos por la cantidad de beneficiarios que ya acudieron a pedir información y en busca de alimentos.

“Me llamó la atención la cantidad de gente que se acercó a preguntarnos si la tarjeta se podía usar acá. En las primeras horas, vinieron, al menos, unas 10 personas”, resumió Rocío Fernández, de la verdulería El Duende, en el barrio El Frutillar.

En un supermercado de la avenida Juan Marcos Herman, las compras con las tarjetas Alimentar comenzaron a visibilizarse a partir de las 11, reveló un empleado que prefirió no dar a conocer su nombre. “A media mañana, las tarjetas no pasaban. Nos salía error de sistema pero después todo anduvo perfectamente. Es sorprendente la cantidad de gente que ya vino a comprar con este programa nuevo”, dijo.

En Bariloche y la región hay unos 3.000 beneficiarios de esta tarjeta que cubre un monto de 4.000 a 6.000 pesos, de acuerdo a la composición del grupo familiar. Pueden ser utilizadas en todos los comercios adheridos a Mastercard y el monto se renueva automáticamente el primer viernes de cada mes.

La entrega de las tarjetas comenzó el lunes pasado, continuó ayer y se extenderá hasta este miércoles en el gimnasio municipal 3. Luego, los plásticos podrán retirarse el banco Nación de Anasagasti al 1400.
Vanesa, de 38 años, tiene tres hijos de 3, 14 y 19 años y ya dispone de la tarjeta del programa. “Está muy buena la idea. Esto de que sea para alimentos y no te den la plata. Es muy difícil hoy todo y es imposible llegar a fin de mes”, dijo.

Más y menos

6.000
es el monto máximo que puede tener acreditada la tarjeta Alimentar de manera mensual. El mínimo es 4.000 pesos.

Los comerciantes coincidieron. Mujeres jóvenes de 25 a 35 años son las que debutaron con la tarjeta en un primer momento. “Acá recibimos a mucha gente de los barrios. Vienen no solo de El Frutillar sino del 2 de Abril, del Malvinas, Nahuel Hue”, dijo Fernández.

En relación a la implementación del programa, la mujer planteó que “es muy positivo para los comerciantes porque fomenta el negocio. Mucha gente que no llega a fin de mes, de esta forma, va a poder comprar. Así que estamos muy contentos. Nos conviene a todos”.

Mónica Sarries, del local La Bombonera, en calle Rolando, contó que aun no recibieron consultas por la compra con tarjeta Alimentar pero lo definió como “una buena manera de incrementar las ventas en los comercios de barrios ya que tal vez algunas personas, al no tener otro medio como tarjetas de débito o crédito, es la posibilidad que tienen de comprar”.

Claudio Cabaleiro, de la Cámara de Comercio de Bariloche, destacó “la inyección de 13,5 millones de pesos” del programa en Bariloche. “Es dinero que no estaba y que no sale del circuito productivo interno. Es un aporte de Nación”, resumió.

Un empleado de seguridad de un supermercado del sur de la ciudad fue testigo de varios casos en que los beneficiarios de la tarjeta intentaban comprar pañales o productos de perfumería pero los cajeros advertían que solo era para alimentos y que “les darían de baja la tarjeta”.

Algunos pequeños comerciantes consultados admitieron que desconocen cómo funciona la tarjeta. Germán Guaresti, secretario de Política Alimentaria del Ministerio de Desarrollo Humano de Río Negro, aseguró que “personal de Inspección General ya estuvo recorriendo y explicando en los comercios acerca de un buen uso de la tarjeta, que no cobren extra, etcétera”.


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