Madres en contra de la ley de educación sexual se manifestaron en Neuquén

Mientras el cuerpo colegiado del Consejo Provincial de Educación (CPE) debatía esta mañana la presentación de notas que intiman a desarrollar los contenidos de la Educación Sexual Integral (ESI) “sin proselitismos ideológicos ni adoctrinamiento”, un grupo de manifestantes se presentó en el organismo exigiendo participar del debate.

El vicepresidente del CPE Gabriel D’Orazio recibió al grupo y recepcionó una nota destinada a la ministra de Educación Cristina Storioni. Anteriormente la funcionaria había recibido a representantes del grupo, pero las manifestantes insistían en participar.

Luego interpelaron en un pasillo al vocal gremial Gustavo Aguirre, con momentos de tensión y voces elevadas. Hubo un intercambio que no llegó a ningún resultado, por lo que se frustró, pero las madres permanecieron en el lugar. “Ustedes deciden por nuestros hijos” fue la acusación de las manifestantes. “No, nosotros decidimos en función de la ley”, fue la respuesta del vocal.

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Entre sus pedidos, el grupo de “madres y padres autoconvocados por la educación de Neuquén” resaltaron el de la objeción de consciencia no sólo para los médicos sino para todos los integrantes de la comunidad educativa. Esta misma agrupación ha realizado acciones anteriormente en contra de los paros docentes, causa que impulsó la formación de la misma a comienzos de año. Además afirmaron no estar en contra de la educación sexual pero sí de los contenidos que referidos a la ley de identidad de género.

El tema que trata hoy el cuerpo colegiado también surgió de este grupo, ya que familias han enviado notas a los establecimientos educativos una nota -exactamente la misma en cuanto a formato y redacción- en la que plantean: “La escuela no es un lugar para el adoctrinamiento, por ello, manifestamos nuestro absoluto rechazo a toda información, material, actividad, capacitación, etc. que contenga ideologías, particularmente la ideología de género y la ideología proabortista ampliamente debatida y rechazada por las instituciones democráticas. Así también rechazamos toda clase de ideologías tanto culturales, filosóficas como políticas partidarias sobre la educación sexual de nuestros hijos que sean contrarias a nuestros principios morales y éticos”.