Necesitan 40 dadores para tratar a un cipoleño que padece ELA

CIPOLLETTI (AC).- La familia de un médico cipoleño necesita reunir casi 40 dadores de sangre del grupo “B”. Al profesional le diagnosticaron la enfermedad ELA, que es la que se hizo conocida con la campaña del baldazo de agua fría. Como parte del tratamiento, los neurólogos piensan someterlo a una práctica muy riesgosa. Intentarán separar el propio plasma de su sangre, que es el que está afectado, para reemplazarlo por el de los donantes. Si consiguen los voluntarios el procedimiento se realizará en el Policlínico de Cipolletti con un equipamiento exclusivo. El médico Rubén Sánchez Aiech, que es clínico y especialista en farmacología, estuvo recibiendo tratamiento en Buenos Aires por otra enfermedad pero después los profesionales descubrieron que en realidad lo estaba afectando la Esclerosis Lateral Amiotrófica (ELA). La ELA es una enfermedad degenerativa de tipo neuromuscular. Se origina cuando unas células del sistema nervioso llamadas motoneuronas disminuyen gradualmente su funcionamiento y mueren, provocando una parálisis muscular progresiva de pronóstico mortal. En sus etapas avanzadas los pacientes sufren una parálisis total. Hace un tiempo la enfermedad fue muy difundida por el desafío del balde helado, aunque hasta ahora carece de un tratamiento que la detenga. Sin embargo los neurólogos y hematólogos que están trabajando en el caso del cipoleño Sánchez piensan someterlo a una práctica para cambiarle el plasma de su sangre. Para eso necesitan 34 dadores del grupo sanguíneo “B”, factor positivo o negativo. Es un tratamiento muy riesgoso y casi inédito en el país. Como el grupo “B” es uno de los más difíciles de conseguir, la familia del médico impulsó varias campañas para reunir a los donantes. “Hay tres equipos en el país para llevar adelante este procedimiento y uno fue enviado al Policlínico de Cipolletti para la transfusión de mi papá”, contó ayer una de sus hijas. Los dadores pueden presentarse de 8 a 9:30 en el Servicio de Hemoterapia del Policlínico Modelo de Cipolletti, en San Martín 995. Podrán desayunar líquidos (te, café, mate cocido con azúcar) exceptuando lácteos, pan y derivados. La ELA afecta a unos 3.000 argentinos y a más de 350.000 personas en todo el mundo.