Neuquén quiere poner orden en el sector de las estancias turísticas

NEUQUEN (AN).- Con el dictado de un Reglamento de Establecimientos Turísticos Rurales, el gobierno neuquino busca poner orden en el mercado de las estancias que ofrecen servicios a los turistas. Sobre la base de esta legislación, acaba de habilitar el primer prestador que cumple con las reglas, en la zona de Junín de los Andes.

En territorio neuquino abundan las ofertas de estancias turísticas o establecimientos agrícolas que reciben visitantes y brindan servicios diferentes a los tradicionales.

Trabajan, en reglas generales, con turistas extranjeros que buscan alternativas en zonas inhóspitas de la Patagonia. Según el subsecretario de Turismo de la provincia, Rodolfo Dómina, «el turismo rural constituye a todas luces una estrategia de diversificación de ingresos, tanto para los propietarios de campos como para los productores rurales». Neuquén no contaba hasta ahora con una normativa de «regulación de esta actividad específica, adaptada a los tiempos que corren». Tampoco el gobierno llevaba un registro de establecimientos habilitados bajo esta figura. Por lo pronto, con nueva legislación se habilitó la primera estancia turística que cumple con las reglas: se llama Tipiliuke Lodge y está ubicada en el valle del río Chimuehuín, muy cerca de Junín de los Andes.

Forma parte de la estancia Cerro de los Pinos, que comenzó a funcionar a comienzos del siglo pasado.

«Se trata, de hecho, de uno de los primeros establecimientos rurales que se hayan fundado en la región, y que hoy se dedica a la explotación ganadera, forestal y turística», apuntó Dómina.

Se ofrecen allí actividades como trekking, avistaje de aves y cabalgatas, pero la fortaleza del establecimiento es la pesca de truchas

El gobierno espera, con la nueva normativa, dar «un paso más hacia la diferenciación dentro de la oferta de turismo rural en la provincia. La sistematización de los establecimientos rurales turísticos permitiría también el aprovechamiento en contra-estación de los servicios turísticos receptivos», dijo el subsecretario de Turismo.

A los visitantes a estas estancias turísticas suelen atraerlos la posibilidad de participar de actividades como el arreo del ganado, una yerra o una doma, además de las cabalgatas.