Empezó el juicio que definirá la pena para Colicheo, por matar al trabajador judicial de Roca
Esta mañana pasaron seis testigos por la Ciudad Judicial. En unos días se sabrá qué pena le corresponde por el crimen de Javier Videla, quien fue hallado sin vida tras meses de búsqueda.
Desde el Penal I de Viedma, Antonio Colicheo escucha con atención las declaraciones de los testigos que fueron citados y que ya declararan ante las partes en el juicio de cesura. Esta es la última instancia en el debate oral; la cual terminará de definir el monto de la pena para el hombre condenado por el homicidio de Javier Videla y por portación ilegal de armas.
En unos días más, a inicios de julio, se podrá saber el veredicto de los jueces; pero antes deberán pasar varios testigos en tres audiencias hoy viernes, lunes 27 y martes 28 de junio; ante el fiscal Andrés Nelli, el querellante Marcial Peralta y el defensor Juan Pablo Piombo.
La primera instancia comenzó este viernes pasadas las 9:25 de la mañana y en un poco más de dos horas pasaron seis testigos por el estrado, la mayoría, personal del Poder Judicial y del Ministerio Público de Río Negro.
Pablo Muñoz, el hombre que encontró el cuerpo de Videla casualmente mientras circulaba por Ruta 6; lo halló tras divisar un ave caroñera. Por curiosidad y afinidad con los animales y el campo, bajó a mirar y se topó con el cuerpo. Luego, dio aviso teléfonico a las autoridades.
Por su parte, el comisario Julián Martín, jefe del área de Investigaciones de la Policía quien lideró la búsqueda, habló sobre los más de 40 rastrillajes que se hicieron en la región.
Lo único que buscábamos era encontrar a Videla (…) Les decíamos a los familiares que a esa altura encontrarlo con vida era mucha suerte»
Julián Martín, jefe del área de Investigaciones de la Policía
Además, contó todos los «esfuerzos» realizados por la policía en conjunto con Bomberos para realizar los 40 rastrillajes. «Tuvo un impacto social importante», dijo.
También pasó por el estrado Juan Pablo Acorín, licenciado en Criminalística y funcionario de un área técnica del Ministerio Público Fiscal quien intervino en las diligencias cuando se encontró el cadáver, desde el inicio de la causa por la desaparición de persona hasta el hallazgo. En medio de la audiencia se exhibieron imágenes de contenido sensible para graficar la investigación que se llevó adelante.
Se confirmó que el cuerpo fue encontrado el 17 de noviembre pasado a 35 km del campo La Perseverancia (donde apareció sin vida Claudia Casmuz) y a 43 km de la ciudad de General Roca, a 36 metros de a ruta; en avanzado estado de descomposición. Allí se determinó que hubo un desplazamiento del cuerpo y se encontraron restos de cabello.
Pasadas las 10:30 comenzó a declarar Graciela Stadler, una compañera laboral del fallecido quien compartía con Videla funciones en una Cooperativa gestada entre trabajadores que tenía una función social en la adquisición de terrenos a menor costo para los empleados.
La mujer participó de los rastrillajes colectivos que se lanzaron para encontrarlo. «Queríamos ayudar a buscarlo. Teníamos la esperanza de encontrarlo», aseguró.
Luego fue el turno de Nancy Vilma Pérez, una amiga y compañera de la víctima, quen trabajaba en la Cámara de Apelaciones donde él desarrollaba sus funciones.
«(Javier Videla) era una persona muy buena, responsable, solidaria…. cuidaba a la mamá, daba clases de ajedrez, tenia muchas actividades. Era muy comprometido, buen compañero y buen amigo»
Nancy Vilma Pérez, una amiga y compañera de trabajo de Videla.
Para finalizar, declaró la licenciada en Servicio Social Roxana Cerdá, quien está a cargo del área de Trabajo Social del Ministerio Público de la Defensa y realizó más de cuatro informes sociales sobre Colicheo y su entorno.
Allí se relató sobre la historia de la familia y el vínculo estrecho entre Colicheo y sus hermanas, quienes aseguraron que el joven padecía problemas de salud que no estaban siendo atendidos, pese a que esperaban asistencia.
«No pudo terminar nivel medio porque tuvo que abocarse al trabajo desde temprana edad», respondió la profesional y agregó que hacía trabajos diversos, rurales, de albañilería y mecánica. «Le gustaban las danzas folclóricas», comentó y por eso había empezado a asistir al IUPA.
Culpable
Gregorio Antonio Colicheo había sido declarado penalmente responsable el 6 de mayo pasado por los delitos de «homicidio simple agravado por el uso de arma de fuego» y “portación de arma de fuego de guerra sin la debida autorización legal». Así lo definió el tribunal compuesto por Gastón Martín, Alejandro Pellizzón y Fernando Sánchez Freytes por voto unánime.
Cabe recordar que Colicheo, quien cumple prisión preventiva, había admitido su responsabilidad en este hecho durante el proceso, por lo cual las partes habían llegado a un acuerdo de juicio abreviado.
El hombre también será juzgado más adelante por el femicidio de Claudia Casmuz, una mujer de 29 años que fue hallada a los pocos días de la desaparición de Javier Videla en un paraje cercano a Roca. Por este hecho, Colicheo podría purgar una condena a perpetua.
El hecho
El 4 de marzo del 2021, fue el día en que desapareció el trabajador judicial después de una serie de incidentes que ocurrieron en una vivienda ubicada en el casco céntrico. En medio de esa violenta situación, a punta de pistola Colicheo se llevó al trabajador judicial a bordo de un vehículo.
La familia, sus allegados y compañeros de trabajo, realizaron varias movilizaciones y manifestaciones para que no se detenga la búsqueda del trabajador judicial.
El 17 de noviembre pasado se confirmó la aparición de su cadáver a 43 kilómetros de Roca en una zona semidesértica. La autopsia confirmó que murió de un disparo de arma de fuego 9 milímetros.
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