Obreros tomaron el control de Cerámica Neuquén y producen

NEUQUÉN

Un espeso humo blanco volvió a salir ayer de la Cerámica Neuquén. Luego de más de 100 días de paralización, los trabajadores decidieron prender los hornos y mostraron ayer su “primera producción bajo control obrero”.

Nueve audiencias de conciliación obligatoria en la Subsecretaría de Trabajo no lograron solucionar el conflicto con el titular de la fábrica, José Luis Villafranca. Pese a la falta de resolución del conflicto, los 140 obreros decidieron motu proprio “poner en producción la planta para salvar los puestos de trabajo”.

Frente a ello y a las acusaciones obreras, Villafranca sostiene: “Faltan a la verdad cuando dicen que hay vaciamiento, que se abandonó la planta, que se robó”. Acusa a la dirigencia del sindicato ceramista de “generar continuas medidas de fuerza, llevando a la Cerámica a una situación límite”. Y ante la decisión de “quedarse con los bienes de la empresa”, Villafranca exige al Estado “hacerse cargo de esta severa ruptura de la ley y la Justicia”.

Ayer por la mañana, los operarios realizaron un acto en los portones de la fábrica junto al Sindicato Ceramista, representantes de Fasinpat (Zanon), gremios y militantes sociales. La jornada coincidió con un reclamo nacional para pedir la reincorporación de los trabajadores despedidos de la autopartista LEAR. “Hoy es un día de lucha para los trabajadores de Neuquén y del país, y en este día de lucha hoy se pone en marcha una fábrica”, rescató el secretario general del gremio ceramista, Marcelo Morales.

“Tenemos claro que esto no termina acá. Cualquier compañero que quiera luchar se va a encontrar siempre con un poder enfrente, sea político o económico”, planteó.

Cerámica Neuquén es la tercera fábrica de cerámicos “recuperada” en Neuquén. La primera fue la de Zanon, que se inició en 2001 y demandó un largo proceso hasta lograr la expropiación, cuya instancia final fue este año, cuando los trabajadores obtuvieron el título de propiedad para la cooperativa Fasinpat. La segunda fábrica bajo control obrero fue la de Stefani, reactivada tras el cierre en 2009 por los obreros que también conformaron una cooperativa, la Cersinpat. Estos últimos aún aguardan la ley que permita declarar la cerámica de utilidad pública y sujeta a expropiación.

“No venimos a tomar la fábrica, queremos que la patronal se haga presente y solucione los problemas que hay en la planta”, manifestó una de las trabajadoras. “Hoy nos hemos decidido a entrar a trabajar por nuestros salarios, nuestras fuentes de trabajo y nuestra dignidad”, aseguró. Luego del acto los obreros invitaron a una recorrida por la fábrica, que ayer produjo su primera tanda de cerámicos bajo gestión obrera.

Agencia Neuquén