El fotógrafo Pablo Grillo fue operado nuevamente y su familia pide dadores de sangre
El reportero gráfico que hirió una granada lacrimógena fue intervenido quirúrgicamente este viernes.
Pablo Grillo, el fotógrafo de 35 años gravemente herido durante la represión de la marcha por los jubilados en el Congreso, fue operado por segunda vez desde que ingresó al hospital Ramos Mejía el miércoles pasado y su familia pide dadores de sangre.
«Salió bien, estamos esperanzados, aunque el cuadro sigue siendo grave«, señaló Fabián Grillo, el padre del reportero que fue alcanzado por una granada lacrimógena cuando las fuerzas de seguridad avanzaban sobre los manifestantes.
Contó además, en diálogo con el medio Página 12, que cuando se le retiró la sedación a su hijo, tuvo una leve reacción, algo que fue interpretado como una señal alentadora por parte del equipo médico, aunque de todas formas pidió evitar expectativas apresuradas.
La familia del reportero, en información citada por el mismo diario, indicó que la operación de este viernes se pudo realizar sin complicaciones y permitió drenar un hematoma.
También solicitó donantes de sangre o plaquetas para acompañar el tratamiento. El lugar y horario para hacerlo es el siguiente.
- Hospital Ramos Mejía – Urquiza 609, CABA
- Lunes a viernes, de 8 a 11 hs
- Se debe Indicar que la donación es para Pablo Grillo, en el sector de hemoterapia
En este sentido el padre de Pablo recordó que los médicos serán quienes definan «si extraen sangre o plaquetas», pero pidió a los que se acerquen que «digan su nombre».
Qué plantea la reconstrucción de la agresión a Pablo Grillo en el Congreso
La reconstrucción de los hechos, en la que intervinieron los peritos científicos, Guillermo «Willy» Pregliasco y Martín Onetto, logró calcular la trayectoria del proyectil que impactó sobre el cráneo de Grillo.
Esto se hizo mediante la comparación de imágenes y la relación con el sonido del disparo, identificaron la posición del efectivo que dispara, ubicado a un costado de un camión hidrante, según indicó Ámbito.
«En nuestra reconstrucción se puede ver con claridad el lugar especifico de donde salió el disparo y el ángulo de tiro horizontal. Lanzaron el gas lacrimógeno como si fuera una bala. Grillo no fue herido por una mala fortuna: le tiraron a matar«, sentenciaron.
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