Instalaron un radar en Neuquén que avisa si habrá una tormenta perfecta

En la meseta neuquina se erige una torre de metal de casi 30 metros de altura, que en su cúspide sostiene una blanca esfera de grandes dimensiones. Parece una pelota de fútbol, pero en su interior no contiene aire sino que un enorme y potente radar.

Es un “radomo” fabricado en Bariloche por el Invap, que permite obtener imágenes nítidas en un radio de 400 kilómetros y servirá para que los servicios de meteorología provincial y nacional anticipen cada vez que esté por comenzar una tormenta.

“Es uno de los diez radares que integra el Sistema Nacional de Radarización Meteorológica que se implementó a partir del 2011, a pedido del Consejo Hídrico Nacional. El proyecto avanzó con radares integrados y se seleccionaron sitios, la selección se hizo en función de la población y la provincia de Neuquén planteó que se debían proteger vidas y también mitigar potenciales efectos en la actividades económicas como la superficie irrigada y la hidrocarburífera”, explicó Betina Laurenzano, directora general de Fiscalización Hídrica.

Sostuvo que la finalidad del radar es “ajustar los pronósticos del tiempo”. “Nosotros con la AIC recibimos los pronósticos del Servicio Meteorológico Nacional, pero eso se hace con imágenes satelitales. Cuando advierten que va a llover es por zona, no se pude localizar si es en Centenario, Plottier o Neuquén. Lo que permite el radar es hacer un seguimiento de la tormenta en tiempo real por eso es necesaria la conectividad con la fibra óptica”, destacó.

Por ese motivo enfatizó que el radar permitirá a las autoridades actuar con mayor eficiencia en caso de que se presenten tormentas convectivas, porque podrán localizarlas de antemano.

Explicó que “primero se había seleccionado un lugar en Loma Campana, pero no cumplía con todos los requisitos necesarios para colocarlo. Los requisitos son además de la seguridad, que se instale en un lote fiscal de municipio o provincia, en un radio despoblado de viviendas permanentes de 300 metros, y también que cuente con conexión de fibra óptica”.

En ese contexto Laurenzano comentó que el lugar más apropiado fue el predio que el EPAS tiene en la meseta neuquina, donde funciona la planta potabilizadora que recibe agua de la red del Mari Menuco.

Puntualizó que “el radar cubre un radio de hasta 400 kilómetros” y detalló que en los puntos más cercanos al mismo, los equipos instalados ofrecen mayores detalles de las tormentas. “De 0 a 120 kilómetros de radio ya permite saber qué tamaño de partículas hay, si va a haber lluvia o granizo y el tamaño del granizo. Toda la estructura de la tormenta”, detalló.

“Con esto vamos a poder ver las tormentas que se forman acá y podremos ajustar nuestros propios pronósticos”,

aseguró Betina Laurenzano, directora general de Fiscalización Hídrica.

Habrá cinco estaciones en el interior neuquino

La antena forma parte del Sistema Nacional de Radares Meteorológicos (Sinarame), un programa de la Subsecretaría de Recursos Hídricos de la Nación, el Servicio Meteorológico y organismos nacionales y provinciales.

El desarrollo, construcción e instalación fue realizado por Invap.

La obra está concluida pero requiere la instalación de cinco estaciones meteorológicas en el interior provincial para funcionar con plenitud.