Por la situación en terapia intensiva de Roca, el Ministerio de Salud abrió una investigación

La cartera de Salud de Río Negro inició la intervención ante las denuncias cruzadas entre la jefa médica del servicio de terapia y enfermeras. Sigue abierto el pedido de separación del cargo.

El Ministerio de Salud de Río Negro informó de manera oficial que tomó intervención ante las denuncias penales cruzadas por parte de la jefa de la Unidad de Terapia Intensiva del hospital de General Roca, Cristina Orlandi, y enfermeras del mismo sector.

Las presentaciones ante la justicia e institucionales, iniciaron en primer lugar por parte de las trabajadoras quienes acusaron a la profesional de cometer hechos violentos contra ellas, y la médica, quien las contra denunció por supuestas «torturas» a pacientes tras bañarlos con agua fría.

Autoridades del organismo del Ejecutivo Provincial, «solicitaron la apertura de una investigación interna y sumario administrativo, para determinar qué fue lo que sucedió en el área y qué motivó las denuncias realizadas», informaron oficialmente.

Para avanzar en la investigación, el ministerio trabaja desde el área de Asesoría Legal y Recursos Humanos del organismo central, como así también desde la Dirección del hospital Francisco López Lima.

«Hasta tanto no avance (la investigación) no hay definiciones», aseguraron desde el organismo tras la consulta de RIO NEGRO.

Ayer, en una asamblea con la directora del hospital, Ana Senesi; trabajadores nucleados en los tres gremios hospitalarios solicitaron la apertura de un sumario y separación preventiva del cargo de la jefa.

Denuncia de «violencia laboral» en terapia intensiva


El viernes pasado surgió un acto de violencia desde la jefa médica hacia colegas, y ese acto de violencia fue denunciado judicialmente. Hoy venimos como corporación a denunciar y a exigir que en forma preventiva, se separe del cargo a la a la jefa médica hasta que toda la acción administrativa se lleve adelante”, dijo ayer a RIO NEGRO Verónica Curilen, una trabajadora del hospital y licenciada en Enfermería.

Curilen relató todo el conflicto en orden cronológico, que se desencadenó hace mas de un mes, luego de la apertura de la UTI II en abril pasado. “En ese momento denunciamos que esa terapia no está en condiciones de ser abierta bajo las condiciones edilicias para poder trabajar. Hay muchas falencias”, recordó la trabajadora.

El 9 de mayo, hace un mes, desde la Asociación de Enfermería, ya habían denunciado públicamente violencia laboral en la terapia intensiva por parte de la jefatura de médicos e hicieron un llamado al diálogo para resolver la situación.

El descargo de la jefa de terapia intensiva


Cristina Orlandi, jefa médica del servicio de Terapia, dialogó ayer con RIO NEGRO y volvió a aclarar que su «intervención» fue para proteger a los pacientes y contener a familiares.

Dijo que fue a partir de «la afirmación de la jefa de Enfermería de UTI, Angela Arriola, el día 29 de Mayo, quien había dicho que se estaba higienizando a los pacientes con agua fría y que no aceptaban calentar el agua con pavas eléctricas para presionar a la dirección del hospital en el arreglo de la caldera, que creían era una mentira», lanzó la médica intensivista. Para la acusada, ese fue el detonante del «lamentable y penoso conflicto«, según declaró ayer.

Cabe recordar que el lunes la jefa de la UTI había denunciado públicamente que bañaron a pacientes críticos con agua fría y presentó una denuncia por amenazas contra las enfermeras, luego de que ellas elevaran las propias.


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